NUEVA DELHI. Un tribunal especial indio ha condenado este miércoles a muerte a cinco de los doce condenados por los atentados contra trenes en 2006 en Bombay en los que murieron 188 personas, mientras que los siete restantes han sido condenados a cadena perpetua.

La acusación había solicitado la pena de muerte contra ocho de los condenados y la cadena perpetua para cuatro de ellos. Los doce fueron declarados culpables hace dos semanas de los siete atentados con bomba contra varios trenes el 11 de julio de 2006 en los trenes suburbanos de Bombay.

En concreto, según informa 'Times of India', se ha condenado a muerte a los cinco responsables de la colocación de las bombas, mientras que los acusados del apoyo logístico y el suministro de los temporizadores han sido condenados a cadena perpetua.

Las autoridades indias han acusado al grupo islamista Lashkar-e-Taiba, con base en Pakistán, de estar detrás de estos atentados y en concreto han acusado a su líder, Azeem Cheema, de ser el cerebro detrás de la operación.