túnez - El Gobierno tunecino inició ayer una remodelación de los servicios de seguridad, que según los expertos consultados es clave para evitar que el yihadismo que florece en sus fronteras arraigue en el país y amenace su endeble democracia con atentados como el del pasado miércoles.

Fuentes oficiales confirmaron que el ministro de Interior, Mohamad Nayem Garzalli, relevó en las últimas horas a los responsables de diez departamentos de seguridad y distritos de la capital “considerados sensibles”.

Asimismo cesó al jefe de la dirección general para Asuntos de Fronteras y Extranjería, después de que se conociera que los autores de la masacre del miércoles en el museo de El Bardo -en la que murieron 20 turistas extranjeros- habían entrado en el país de forma clandestina desde Libia el pasado diciembre.

Además, ordenó abrir una exhaustiva investigación para esclarecer por qué no había guardias de seguridad ni en la puerta del Parlamento ni en el aparcamiento del museo en el momento del atentado, asumido por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).

muchas necesidades “Está bien que haya medidas de este tipo, pero son a todas luces insuficientes. Se necesita una remodelación absoluta en los servicios de seguridad y en la estrategia en la lucha antiterrorista”, explicó Naser al Hani, abogado tunecino experto en terrorismo yihadista.

“Se necesitan inversión en nuevo equipamiento, más personal y sobre todo mejor formación para los agentes”, agregó el experto, que vivió en Argel en los años de la guerra entre el Ejército argelino y los radicales. “Actualmente hay 3.000 personas dedicadas a la lucha antiterrorista en todo el país. Faltan medios humanos pero también técnicos. Se necesita tecnología más avanzada y, sobre todo, un mejor trabajo de inteligencia”, subrayó.

En la misma línea se pronunció un miembro de los servicios secretos, quien criticó que durante los años de la reciente transición en los que gobernó el movimiento islamista An Nahda, entraron en las fuerzas de seguridad muchas personas “con una formación deficiente”.

“Incluso se colaron muchos islamistas que no tenían un compromiso verdadero con el proceso democrático”, agrega el agente, que prefiere no ser identificado.

“Se necesita una limpieza interna, una verdadera revolución en el seno del Ejército y los servicios de inteligencia”, ya que si no es muy posible que atentados como el del miércoles puedan repetirse, reitera Al Hani.

Según el Gobierno, el ataque fue obra de dos yihadistas tunecinos que estaban fichados, a los que se les seguía la pista desde que regresaron al país a escondidas el pasado diciembre, pero a los que no se les consideraba especialmente peligrosos.

El padre de uno de ellos ya admitió el miércoles, poco después del asalto con rehenes, que su hijo había salido de casa hacía tres meses y que lo último que había sabido de él era que había viajado a Siria o Irak para sumarse al EI.

De acuerdo con fuentes de la lucha antiterrorista, Túnez es el principal exportador de yihadistas a Siria e Irak con unos 3.000 voluntarios, de los que 500 se considera que ya han regresado al país.

Una parte de ellos han sido encarcelados, pero otros muchos viven libres, principalmente en barrios del cinturón pobre de la capital -como el de Sidi Bechir, vecino al museo atacado-, con la única obligación de presentarse de forma regular en la comisaría.

Otra parte de ellos luchan, igualmente, en las filas de la rama libia del Estado Islámico, como el comandante muerto en la localidad de Sirte la misma semana del atentado en una batalla con fuerzas del gobierno rebelde establecido en Trípoli.

“También es necesario que haya una mayor colaboración con los países vecinos, en particular con Argelia. Hay que asegurar la frontera con Libia y colaborar también con Europa”, argumenta el agente. - Efe

El coordinador antiterrorista de la UE, Gilles de Kerchove, advirtió que se debe “subestimar la lucha feroz entre Al Qaeda y EI por el liderazgo de la yihad global”.

Cadáveres descubiertos. La toma por tropas de Níger y Chad de la ciudad de Damasak, controlada por los islamistas, llevó al descubrimiento ayer de decenas de cadáveres mutilados a manos de los yihadistas.

Direcciones de soldados. La llamada división de piratería del grupo terrorista Estado Islámico difundió ayer en Internet un centenar de supuestas direcciones de soldados de EEUU e instó a asesinarlos. En la nota, el EI incluye las fotografías de presuntos soldados de EEUU con sus nombres, rango dentro del Ejército y sus domicilios.

fallecidos. Al menos 63 seguidores del régimen sirio de Bachar al Asad han muerto en las últimas 24 horas en combates contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) en la zona de Sheij Hilal, en el este de la provincia central de Hama, informó hoy el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Además, la cifra de fallecidos por los dos dobles atentados perpetrados ayer contra dos mezquitas chiíes en la capital yemení ha ascendido a 154 muertos.