El primer ministro británico, David Cameron, se declaró ayer “furioso” tras la petición de la Comisión Europea (CE) a Reino Unido de 2.100 millones de euros adicionales para ajustar su aportación al presupuesto comunitario y opinó que ello no ayudará a que su país siga en la Unión Europea. “No es aceptable, no voy a pagar esa cuenta el 1 de diciembre, eso no va a pasar”, dijo Cameron en rueda de prensa al término de la cumbre europea celebrada en Bruselas.
El mandatario británico indicó que la forma en que la CE ha tratado a Reino Unido al reclamarle una suma “inaceptable” y darle un plazo tan breve para pagarla, “seguro que no ayuda” en las opciones de que ese país siga en la UE tras el referéndum sobre su permanencia previsto para 2017.
El Ejecutivo comunitario reclama ese dinero debido a que la economía británica se ha comportado mejor que el resto de las economías europeas desde 1995. “Es una forma inaceptable de actuar para esta organización, el presentar de repente una suma así, con tan poco plazo para pagarla”, señaló, y añadió que, comportándose de esta manera, la UE “no debería sorprenderse si sus Estados miembros le dicen que tiene que cambiar”.
La canciller de Alemania, Angela Merkel, confirmó que el tema se abordó, pero consideró que “son procedimientos normales que, por cambios en el método de cálculo para este año, (la suma reclamada) ha salido en parte un poco elevada, tanto para los que tienen que pagar como para los que reciben una devolución”.
“El primer ministro italiano (Matteo Renzi) lo ha descrito mejor que nadie al decir que esto no es una cifra, sino un arma letal. Cuando se fabrica un arma letal como esta (...) hace que la gente en la UE piense que la Comisión Europea es una panda de burócratas y tecnócratas, y estoy de acuerdo con cada una de sus palabras”, dijo Cameron.
desmentido de Renzi Renzi, sin embargo, negó haber calificado de “arma letal” esa petición, y subrayó en conferencia de prensa que él centró sus críticas en la “burocracia y tecnocracia. Esto lo pienso”.
El primer ministro británico explicó que lo primero que hizo al saber el jueves de la petición de Bruselas fue interrumpir las discusiones en la cumbre para exigir una reunión extraordinaria de ministros de Finanzas con el objetivo de tratar el asunto.
Los líderes acordaron que sean la CE y los ministros de Hacienda quienes aborden la situación en una próxima reunión, señaló Merkel, al igual que por separado hizo el presidente saliente del Ejecutivo, José Manuel Durao Barroso, quien afirmó que “todos los cálculos se han hecho por Eurostat con los datos sobre la renta nacional bruta aportados por los organismos nacionales de estadísticas. Son los datos que Reino Unido ha dado”.
El país más afectado por el ajuste planteado sería el Reino Unido, seguido de Holanda, que debería aportar unos 600 millones de euros, pero también tendrían que hacer aportaciones suplementarias al presupuesto comunitario Bulgaria, Irlanda, Malta, Grecia, Italia, Chipre y Letonia.
los apuntes
Francia pide respetar los acuerdos. El presidente de Francia, François Hollande, pidió “respetar los tratados también cuando son malas noticias”, al tiempo que reconoció que a su país le devolverán 1.016,3 millones de euros.
Día de despedidas. Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea despidieron ayer a los presidentes salientes del Consejo europeo y de la Comisión Europea, Herman Van Rompuy y José Manuel Durao Barroso, respectivamente, en la que fue su última cumbre europea antes de ser relevados en el cargo el próximo 1 de noviembre.
Tensiones turco-chipriotas. Los jefes de Estado y de Gobierno de la UE expresaron su “seria preocupación” por las tensiones renovadas entre Turquía y Chipre y pidieron a Ankara que respete la soberanía de las aguas territoriales chipriotas.
Buenas palabras, pocos hechos. Los líderes de los países de la zona del euro insistieron en la urgencia de estimular el crecimiento y el empleo, con una mayor cooperación entre los países, para recuperar el pulso de la débil economía europea, aunque sin llegar a pasar de la retórica a la acción.
El presidente del BCE pide más reformas. El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, ha reclamado a los líderes europeos más esfuerzos en materia de reformas estructurales y política presupuestaria, incluyendo estímulos fiscales en los países que tienen margen como Alemania, para evitar una “recaída en la recesión de la eurozona”.