El Cairo - El presidente palestino, Mahmud Abás, y las autoridades egipcias llamaron ayer a un alto el fuego definitivo en Gaza y a reanudar las negociaciones indirectas en El Cairo, pero sobre el terreno no remitió la violencia. Al menos 17 personas resultaron heridas ayer en un bombardeo israelí contra uno de los edificios de apartamentos más altos y lujosos de Gaza, informó el portavoz de ministerio de Salud de la Franja, Asraf al Qedra.

Tras el fracaso de las conversaciones a principios de semana, del que Israel y Hamás se acusaron mutuamente, Abás inició una gira por países claves de la región para intentar que los esfuerzos no cayeran en saco roto. Sus reuniones del viernes en Doha, con el líder de Hamás, Jaled Meshal, y de ayer en El Cairo con el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, han dado en cierto modo sus frutos. En una rueda de prensa tras entrevistarse con Al Sisi, el dirigente palestino instó a la reanudación de las negociaciones sobre el alto el fuego “lo antes posible para evitar que haya más víctimas” en Gaza.

Negociaciones Abás reveló que Egipto iba a cursar una invitación a las delegaciones para regresar a la mesa de negociaciones y estudiar una tregua permanente. Poco después, el Ministerio egipcio de Exteriores, emitió un comunicado en el que instaba a todas las partes a aceptar “un alto el fuego permanente” en Gaza y a reanudar las negociaciones indirectas en El Cairo. La nota no fijó una fecha de convocatoria del encuentro, en el que se abordarían todos los “asuntos pendientes” que llevaron a la ruptura de la tregua de ocho días esta semana. Ni Hamás ni Israel han expresado oficialmente su punto de vista al respecto y en las últimas horas han mantenido su discurso bélico. Nueve personas murieron en esta jornada en Gaza por los bombardeos israelíes, entre ellos un niño palestino de ocho años y cinco miembros de una misma familia. Las Fuerzas Armadas israelíes amenazaron además octavillas sobre la Franja para solicitar a la población que evacúe aquellas áreas utilizadas como lanzaderas de cohetes.

“El Ejército detendrá cualquier operación terrorista y atacará las infraestructuras de grupos palestinos de Hamás y otras milicias”, amenazó Israel, que recordó que “la operación sigue abierta”. Desde el inicio de la ofensiva el pasado 8 de julio han muerto cerca de 2.100 palestinos, por lo que para Abás lo prioritario es “frenar el derramamiento de sangre”.

Una vez consolidada la tregua comenzará la reconstrucción de Gaza y será el momento, según el presidente palestino Abás, de abordar “todas las reivindicaciones”. - Efe