MADRID - Al menos 41 personas murieron, entre fuerzas de seguridad y civiles, a causa de los dos ataques perpetrados ayer por la secta islamista en el noreste de Nigeria, según informaron las autoridades locales.

En la localidad de Buni Yadi, en el estado de Yobe, al menos 17 soldados y 14 policías muerieron cuando los milicianos abrieron fuego contra la base militar y los barracones policiales, según informó una fuente de seguridad. Tras el asalto a las instalaciones de seguridad, los yihadistas quemaron la base militar, los barracones policiales, el tribunal supremo y la residencia del jefe de distrito, Abba Hasán. "Uno de ellos estaba hablando en inglés a los otros: 'Vamos, Vamos. Acabad esto y vámonos", relató un Policía que consiguió salir ileso de este ataque desde la capital estatal, Damaturu.

Al parecer, a su llegada al lugar, en vehículos blindados, los milicianos explicaron a los habitantes de Buni Yadi que no era necesario que corrieran porque, en esta ocasión, su ataque era solamente contra los uniformados. Se trata de una advertencia inusual porque la secta islamista persigue también a la población civil.

Por otro lado, al menos 10 civiles murieron en el ataque que Boko Haram llevó a cabo en la localidad de Chinene, en el estado de Borno, según informó el diario nigeriano The Vanguard. En este caos, los milicianos quemaron dos iglesias y varias tiendas y casas. Por otro lado, Camerún deplegó 1.000 soldados en la frontera con Nigeria para combatir a la secta radical islámica nigeriana Boko Haram, informaron ayer fuentes del Ministerio de Defensa camerunés.

"Estos mil soldados se sumarán a los 600 que ya están allí desde hace tres años", afirmaron las citadas fuentes. El coronel Badjeck Badjeck, portavoz del ministerio de Defensa de Camerún, confirmó el despliegue militar, aunque no precisó ninguna cifra.

"Hemos reforzado el dispositivo de defensa contra Boko Haram en toda la zona norte, compuesta de tres regiones, para la seguridad no solo de la frontera, sino también para mostrar a Boko Haram que podemos acabar con sus actos", explicó el coronel. "Estamos ante una guerra asimétrica, donde el enemigo no se ve. No es una guerra clásica", agregó el portavoz. - Efe/E.P.

EEUU, sin información. El Gobierno de Estados Unidos afirmó que no cuenta con información independiente que confirme la supuesta localización de las 223 niñas secuestradas por la secta islamista Boko Haram.

El Ejército no usa la fuerza. El jefe de Estado Mayor de la Defensa de Nigeria, el mariscal del Aire Alex Badeh, aseguró que las Fuerzas Armadas no utilizarán la fuerza para la liberación de las niñas secuestradas.