Simerópol (Crimea) - La península de Crimea lanzó ayer un órdago a las autoridades de Kiev al aprobar su incorporación a Rusia y convocar un referéndum para ratificar la decisión del Parlamento el próximo día 16. En una fulgurante jornada que recordó a la catarata de proclamaciones de independencia de las repúblicas soviéticas en 1991, la Rada Suprema no dejó lugar a dudas sobre su intención de independizarse con urgencia de Kiev. Los diputados crimeos aprobaron por unanimidad una resolución que declara que la república autónoma ucraniana "se incorpora al seno de la Federación Rusa en calidad de sujeto" federal.

"Estoy absolutamente convencido de que los crimeos apoyarán el ingreso en la Federación Rusa. Hemos esperado 23 años y ahora tenemos una oportunidad histórica de volver a unirnos con Rusia", afirmó Andréi Kozenko, viceprimer ministro de la república autónoma. "Es ahora o nunca. Históricamente, Crimea siempre ha sido rusa y rusoparlante", insistió Kozenko, en alusión al agravio histórico que supuso para los crimeos la decisión del dirigente soviético Nikita Jruschov de ceder la península a Ucrania en 1954.

Sin tiempo para asimilar la noticia, el Legislativo crimeo estableció dos preguntas para el referéndum: la reunificación con Rusia o una amplia autonomía en el seno de Ucrania. "¿Está usted a favor de la reunificación de Crimea con Rusia como sujeto de la Federación Rusa?", rezará la primera pregunta en la consulta que tendrá lugar dentro de diez días. Mientras, la segunda cuestión que se planteará a los crimeos tiene todas las de perder: ¿Está usted a favor de que se vuelva a poner en vigor la Constitución de Crimea de 1992 y del estatus de Crimea como parte de Ucrania?". "La pregunta que reciba el mayor número de votos será considerada la expresión directa de la voluntad de la población de Crimea", señala el documento. En Crimea vive casi un 60% de rusos, a lo que se suma un 25% de ucranianos, además de una minoría tártara, un 12%, partidarios permanecer como parte de Ucrania, aunque la victoria de la reunificación con Rusia en el plebiscito se considera casi garantizada.

Tras el anuncio de Crimea, el presidente ruso, Vladimir Putin, convocó a su Consejo de Seguridad para analizar la situación. El órdago parece haber pillado por sorpresa a las instituciones rusas y al propio mandatario, que hace dos días aseguraba que no buscaba la anexión de la península. A falta de una reacción oficial del Gobierno ruso, desde el poder legislativo, las reacciones no se hicieron esperar. "A día de hoy todos los grupos parlamentarios de la Duma nos pronunciamos a favor de la preservación de la integridad territorial de Ucrania, pero reconocemos el derecho de los crimeos a someter a referéndum los asuntos que estimen convenientes", manifestó el diputado Leonid Slutski, presidente del comité para Asuntos de la postsoviética Comunidad de Estados Independientes.

Quien sí reaccionó fue el Gobierno ucraniano. Mientras, desde Bruselas, el primer ministro Arseni yatseniuk advertía que "si el territorio de Ucrania se ve invadido por fuerzas extranjeras, el Gobierno y el Ejército ucranianos actuaremos de acuerdo con la Constitución y la legislación", el presidente Alexandr Turchínov anunció que la Rada Suprema ucraniana va a iniciar un proceso para disolver el Parlamento crimeo. En un mensaje televisado a la nación, Turchínov calificó de "ilegal e ilegítima" la consulta. "De acuerdo a las facultades que tengo conferidas, he suspendido la decisión del Parlamento de Crimea", añadió. El presidente interino ucraniano subrayó que la cuestión de cambiar las fronteras del país, de acuerdo con la Constitución, solo puede examinarse en un referéndum nacional, por lo que "la celebración de un referéndum local crimeo no es posible".

"Ilegal" El desafío del Parlamento de la república autónoma tampoco sentó bien a Occidente. Tanto la Unión Europea como Estados Unidos se apresuraron en declarar ilegal la convocatoria de la consulta. En una rueda de prensa convocada para analizar la situación, el presidente estadounidense, Barack Obama, sostuvo que el referéndum violaría el derecho internacional y advirtió a Moscú de que se mantendrá firme contra la intervención rusa en Ucrania. "La propuesta de referéndum sobre el futuro de Crimea violaría la Constitución de Ucrania y violaría el derecho internacional. Cualquier discusión sobre el futuro de Ucrania debe incluir al gobierno legítimo de Ucrania", manifestó Obama. "En el año 2014 estamos muy lejos de los días en los que las fronteras podían ser dibujadas por encima de las cabezas de los líderes democráticos", agregó el mandatario.