Bangkok. La Comisión Electoral intensificó ayer el pulso con el Gobierno de Tailandia al proponer que las elecciones del próximo domingo 2 de febrero se retrasen hasta agosto debido las protestas antigubernamentales. La comisión, que lleva semanas reclamando que se pospongan los comicios sin ofrecer una fecha precisa, indicó que el país necesita seis meses para poder acudir a las urnas en un clima de distensión política.

Somchai Srisuthiyakorn, comisionado encargado de la organización de los comicios, señaló que así se lo harán saber a la primera ministra, Yingluck Shinawatra, con la que mantendrán hoy una reunión para abordar la crisis. "El retraso debería ser de seis meses a partir del 2 de febrero. Creemos que es un periodo de tiempo adecuado", para "resolver los conflictos en la sociedad", declaró Somchai, según el diario Bangkok Post.

"No queremos un intervalo demasiado largo, ya que ello supondría que el Gobierno estaría demasiado tiempo en funciones, lo que perjudicaría al país ya que un Gobierno interino no puede hacer mucho", agregó el comisionado.

La propuesta de la Comisión Electoral se produce al día siguiente de que los manifestantes antigubernamentales impidieran el voto adelantado en 89 de las 375 circunscripciones en el país con el bloqueo de numerosos colegios electorales.

Un total de 440.000 personas, el 22% de los dos millones de registrados para la votación anticipada, no pudieron acudir a las urnas, principalmente en el sur y en la capital, donde los antigubernamentales cerraron el 90%de los centros habilitados para el voto.

agresiones a los votantes Muchos votantes expresaron su frustración en algunos de los colegios clausurados, donde los manifestantes bloquearon las puertas con cadenas y llegaron a intimidar físicamente a los que trataban de votar. En un enfrentamiento con seguidores del Gobierno, uno de los líderes de las protestas murió y otra docena resultó herida en un tiroteo en un distrito de Bangkok donde habían bloqueado un colegio electoral. Con este fallecimiento se elevan a diez el número de muertos, la mayoría a causa de disparos o granadas lanzadas contra las protestas desde el pasado noviembre.