primero repicarán todas las campanas de la ciudad de Dallas y después, a las 12.30 en punto, se hará el silencio en Dealey Plaza, en el mismo lugar donde justo 50 años atrás el presidente estadounidense John F. Kennedy fue asesinado. Así será, el próximo 22 de noviembre, el acto central que rememora un asesinato que en 1963 conmocionó a Estados Unidos y que marcó a Dallas con un estigma que le costó décadas superar.
La ciudad tejana quiere, con el 50 aniversario del asesinato presidencial, reconciliarse con el espíritu político de Kennedy y limpiar, de una vez por todas, la etiqueta de Dallas, ciudad del odio.
Llevan más de un año preparando este momento, cuentan con centenares de voluntarios trabajando, esperan a varios miles de visitantes y 500 periodistas se han acreditado, cuenta a Efe un portavoz de la fundación que organiza los actos del próximo día 22. Quien capitanea el comité de organización es Ruth Altshuler, una mujer a quien ese episodio negro le marcó la vida: estaba hace 50 años entre esos centenares de personas que saludaban a la comitiva presidencial y formó parte más tarde del jurado que declaró a Lee Harvey Oswald culpable del asesinato.
"Es importante que la ciudad de Dallas demuestre una voz fuerte al recordar este día tan solemne", declaró en un comunicado Altshuler. "Los donantes han hecho un trabajo maravilloso para tener un evento que está a la altura del sentido de la historia y la dignidad que se merece".
Al acto central del próximo día 22 asistirán 5.000 afortunados entre los 13.000 que solicitaron entrada antes del verano para estar entre el público. David McCullough, considerado uno de los historiadores más conocidos del país, tendrá un peso importante en el acto y leerá fragmentos de varios discursos del presidente Kennedy.
La organización ha avanzado que la ceremonia será seria, sobria, solemne, respetuosa y emotiva, acompañada por la música militar del Naval Academy Men's Glee Club y por una exhibición aérea, además de plegarias con varios líderes religiosos. Los actos de conmemoración están organizados también por el Ayuntamiento de la ciudad, las autoridades del Condado de Dallas, el Estado de Texas y la Administración federal.
De hecho, las autoridades locales activarán un plan especial de seguridad y preparan estos días sus infraestructuras para la llegada de los visitantes, detalló a Efe un portavoz municipal.
Todos los hoteles cercanos al lugar del asesinato responden lo mismo cuando se consulta su disponibilidad para los días de la conmemoración: "agotado", "no disponible" o sólo las habitaciones más exclusivas.
Donde sí quedan habitaciones disponibles es en el antiguo hotel Texas de Fort Worth, ciudad vecina a Dallas, donde Kennedy y su esposa se alojaron la noche anterior al 22 de noviembre en la habitación 850, que ya no existe.
Ya en los días previos, en decenas de puntos de la ciudad, se presentan pequeñas creaciones artísticas que forman parte del Dallas Love Project, que reunirá 30.000 obras en 150 espacios públicos de Dallas, especialmente por donde pasó ese 22 de noviembre la comitiva presidencial.
La iniciativa quiere, según sus promotores, convertir a Dallas en "una galería de arte gigante con 30.000 actos incondicionales de amor, belleza, esperanza e inspiración".
En el Texas Theatre, donde arrestaron a Oswald poco después de la tragedia, proyectarán la película War is Hell, que es justamente la que se estaba exhibiendo en el momento en que el asesino entró en la sala. El acto central se celebrará a las 11.45 hora local (17.45 GMT), varias pantallas gigantes en Dallas proyectarán el evento que podrá ser seguido en directo a través de la página web 50thhonoringjohnfkennedy.com.