El Gobierno venezolano ha anunciado la importación de 50 millones de rollos de papel higiénico para hacer frente al creciente desabastecimiento, atribuido por el ministro de Comercio, Alejandro Fleming, a una supuesta "campaña mediática" de la oposición para "perturbar el país". Fleming alertó del incremento de la demanda de ciertos productos básicos debido a las "compras nerviosas". En este sentido, alegó que "no hay deficiencia en la producción", sino una "demanda excesiva" resultado "de la campaña mediática que se ha generado para perturbar al país". "Vamos a saturar el mercado para que nuestro pueblo se tranquilice y comprenda que no debe dejarse manipular por la campaña mediática de que hay escasez", prometió el ministro, durante una reunión con la directiva de Papeles Venezolanos (Paveca) recogida por los medios oficiales.
Según Fleming, los venezolanos consumen al mes una media de 125 millones de rollos de papel higiénico y actualmente hacen faltan "unos 40 millones adicionales". En base a estos datos, el ministro adelantó la inminente importación de 50 millones de rollos para demostrar a la oposición que "no logrará doblegar" al Gobierno.
Asimismo, y a través del Instituto para la Defensa de las Personas en el Acceso a los Bienes y los Servicios (Indepabis), las autoridades reforzarán la fiscalización para garantizar que estos productos lleguen a la población a un precio justo. La medida también podría extenderse a la pasta de dientes y el jabón.
Alimentos En medio de esta crisis está el empresario Lorenzo Mendoza, propietario de Empresas Mendoza, principal productor de alimentos básicos en Venezuela. El fin de semana el Gobierno declaró que sospechaba que Mendoza, dueño de la segunda fortuna del país y ocupante del lugar 329º en la lista Forbes de los millonarios del mundo, había recortado la producción para el mercado local de harina precocida, con la cual se elabora la arepa, uno de los platos típicos de la mesa venezolana. Contra todo pronóstico, contradiciendo el bajo perfil que suele cultivar, Mendoza convocó una rueda de prensa para desmontar los argumentos del Ejecutivo venezolano: dijo entonces que operaba a su máxima capacidad, que su producto de harina precocida representaba el 48% de la producción de Venezuela y que la escasez obedecía a deficiencias de producción de los demás competidores. Él y Maduro ya han hecho las paces.