MANILA. Entre las víctimas mortales se encuentran el guía y varios extranjeros, aunque de momento no han confirmado las nacionalidades, indicó Eduardo del Rosario, director del Consejo Nacional de Gestión y Reducción de Desastres de Filipinas.
En declaraciones al canal de televisión GMA, Del Rosario afirmó que una veintena de montañeros en tres grupos diferentes se encuentran cerca del cráter del volcán, donde la explosión se produjo a primera hora de la mañana.
Un equipo de rescate se dirige a la zona y la alerta continúa en cero, ya que no hay peligro de erupción a pesar de la explosión freática, que se produce cuando el magma entra en contacto con agua en el subsuelo provocando una súbita nube de vapor, ceniza y piedras.
El gobernador de la provincia de Albay, Joey Salceda, explicó que los excursionistas fueron golpeados por las rocas de la explosión y agregó que dos turistas de un grupo de siete indonesios fueron rescatados.
Salceda aseveró que las muertes ocurrieron en otro grupo que utilizó la ruta Malilipot para ascender al Mayón, situado en la provincia de Albay en el suroeste de la isla de Luzón.
"Se trata de un evento freático muy pequeño. Es algo normal", señaló por su parte Espie del Mundo, especialista del Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (Phivolcs).
Del Mundo recomendó a los vecinos que se mantengan alejados de las zonas de riesgo, aunque recordó que una explosión freática es menos violenta que una erupción y no se ha registrado ningún seísmo en las últimas 24 horas.
Precisó que la explosión freática es causada por la presión acumulada durante años y que la última se produjo en 2010.
La última erupción del Mayón fue en el 2006 y no causó víctimas mortales, pero dejó una gran acumulación de restos que luego un tifón y lluvias torrenciales convirtieron en ríos de barro que mataron a 1.300 personas en la ciudad de Legazpi y alrededores.
Mayón es uno de los volcanes más activos y bellos de Filipinas y lo visitan cada año cientos de turistas en la Isla de Luzón.
La peor de sus 45 erupciones conocidas fue en 1814 y causó 1.200 muertos y enterró la ciudad de Cagsawa, bautizada desde entonces como "la Pompeya filipina".