berlin. El nuevo primer ministro de Italia, Enrico Letta, comenzó ayer su mandato en una jornada intensa que le llevó al Senado de su país y, poco después, hasta Alemania para reunirse con la canciller Angela Merkel. En ese encuentro, los dos mandatarios coincidieron en señalar que necesitan un fortalecimiento de las instituciones europeas para superar la crisis.
Letta comenzó su día en el Senado salvando uno de los escollos más importante que ha tenido la política italiana desde las últimas elecciones. Y es que esa ha sido la cámara que ha vetado una y otra vez al líder de la coalición vencedera, Pier Luigi Bersani. El visto bueno a Letta no supuso ninguna sorpresa después de que el reelegido presidente italiano, Giorgio Napolitano, pusiera a los partidos de acuerdo para formar un Gobierno de coalición entre el centroizquierda Partido Demócrata, el conservador Pueblo de la Libertad de Silvio Berlusconi y la centrista Elección Cívica de Mario Monti.
alemania, su primer destino El paso, aunque importante, no supuso ninguna sorpresa ya que estaba previsto que el Senado repaldara a Letta. El encuentro verdaderamente importante fue en la tarde de ayer, cuendo se reunió con la canciller Angela Merkel. El primer ministro acudió a una de las líderes con más peso en Europa para recordar ante ella la importancia de la UE.
Merkel, por su parte, subrayó que, además de las reformas en cada uno de los países, es necesario mejorar las herramientas de la UE para combatir la crisis. "Por un lado cada uno de los países miembros de la UE tienen que hacer sus deberes y en ello Italia ha recorrido un trecho importante. Pero por otro lado, también tenemos que mejorar las herramientas de la UE", dijo Merkel.
En este último apartado, según la canciller alemana, se han dado pasos importantes como el pacto fiscal y la creación del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y hay que seguir trabajando hacia la supervisión bancaria común y hacia una mayor coordinación de las políticas económicas.
Merkel reiteró además su convicción de que los ajustes presupuestarios y el crecimiento económico no son objetivos opuestos, sino "complementarios" en la lucha contra la crisis que atraviesan varios países.
En la rueda de prensa conjunta, la jefa del Gobierno alemán destacó que "la consolidación fiscal" y "el crecimiento" son fundamentales para mejorar la "competitividad" y fomentar la creación de empleo.
Por su parte, Letta subrayó ante la canciller el compromiso de su gobierno de "seguir con el saneamiento de las cuentas públicas" y enfatizó los avances logrados por Italia en este sentido en los últimos meses. A su juicio, si el Europa sigue en crisis después de cinco años es porque no ha habido "suficiente Europa".
El primer ministro italiano, que destacó que su país ha salido "reforzado" de estos meses de "crisis política", afirmó que el suyo es un Ejecutivo "claramente político" y con respaldo parlamentario que va a trabajar por recuperar la "confianza" en la política y las instituciones.
Además Letta anunció ayer que la próxima semana se reunirá con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, con quien habló por teléfono ayer mismo.