londres. Margaret Thatcher, la ex primera ministra británica conservadora que gobernó con mano dura y transformó el Reino Unido con sus políticas liberales de reducción del Estado, murió ayer a los 87 años de un ataque cerebral. En el poder entre 1979 y 1990, la llamada Dama de Hierro padecía de demencia senil y ayer sufrió una apoplejía que le provocó la muerte, informó su portavoz, Timothy Bell. Thatcher, una figura política colosal por su influencia dentro y fuera de las fronteras del Reino Unido, tendrá un funeral "con honores militares" en la catedral de San Pablo de Londres en una fecha aún por determinar, explicó un portavoz del Gobierno. De acuerdo con algunos medios británicos, Thatcher falleció en una suite del lujoso hotel Ritz de Londres, donde residía desde el pasado enero para "recuperarse de una cirugía menor".

La exlíder conservadora fue la única mujer en alcanzar el puesto más alto del poder en el Reino Unido, donde ganó tres elecciones generales consecutivas -1979, 1983 y 1987- y se convirtió en la política que más tiempo estuvo en el Gobierno en el siglo XX.

Su fallecimiento sorprendió al primer ministro británico, el también conservador David Cameron, en Madrid, donde estaba reunido con el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, y la noticia le hizo cancelar la visita prevista para ayer a París, donde iba a entrevistarse con el presidente francés, François Hollande. La reina Isabel II de Inglaterra expresó, en una nota muy escueta, su pesar por la muerte de la ex primera ministra y se limitó a comunicar que enviará un mensaje privado a la familia.

Admiradores y detractores de Thatcher unieron ayer fuerzas para rendirle tributo, pero también hubo fuertes críticas de quienes ven en la Dama de Hierro a una política que dividió al país.

adams, "causó mucho daño" El líder del Sinn Fein, brazo político del inactivo Ejército Republicano Irlandés (IRA), Gerry Adams, dijo ayer que Thatcher "causó mucho daño" a los pueblos irlandés y británico, y "las comunidades de clase obrera fueron devastadas por sus políticas".

El sucesor de Thatcher, el conservador John Major (en el poder entre 1990 y 1997), lamentó la pérdida de una persona que calificó de "fenómeno político" y una "auténtica fuerza de la naturaleza". "El Reino Unido cambió totalmente y, en gran medida, bajo su liderazgo", recordó el exlíder tory a los medios de comunicación tras conocerse el fallecimiento de su correligionaria.

En la misma línea se manifestó el ex primer ministro laborista Tony Blair, quien en un comunicado señaló que son "pocos los líderes que logran cambiar no solo el panorama político de su país, sino el del mundo entero" como hizo Thatcher, "una verdadera líder".

Nacida el 13 de octubre de 1925 en Grantham (norte de Inglaterra), Thatcher procedía de una familia de modestos recursos y su padre había sido propietario de dos tiendas de comestibles, pero su tesón la llevó a estudiar química y después derecho.

Con una personalidad avasalladora y sin rendirse ante las situaciones más adversas, Thatcher se ganó la admiración de los políticos de su tiempo, desde el exmandatario de EEUU Ronald Reagan hasta el antiguo presidente de la extinta Unión Soviética Mijaíl Gorbachov, así como el exdictador chileno Augusto Pinochet.

La transformación del Reino Unido bajo los gobiernos de Thatcher pueden observarse hoy en el país, donde los sindicatos han quedado debilitados y el sector privado controla muchas de las actividades que en su día correspondían al Estado, como los ferrocarriles.

Conservadora y euroescéptica hasta la médula, Thatcher se negó al proceso de integración europea y son célebres sus comentarios en el Parlamento y la televisión de "No, no, no a Europa".