roma. Italia se encamina hacia la ingobernabilidad tras las elecciones generales, cuyos primeros resultados dibujan el escenario de un Senado en el que ni el centroizquierda ni el centroderecha obtienen una mayoría clara, al tiempo que entra con fuerza la formación antipolítica del cómico Beppe Grillo. Según los primeros datos de escrutinio facilitados por el Ministerio del Interior, los resultados de los comicios, en los que estaban llamados a las urnas más de 50 millones de italianos, muestran además cómo el primer ministro saliente, Mario Monti, quien en noviembre de 2011 se puso al frente del Gobierno tecnócrata, no obtiene el respaldo de los electores para un segundo mandato.

Con más del 75 % de las secciones electorales escrutadas en el Senado, la primera de las Cámaras cuyo voto es recontado, la coalición de centroizquierda de Pier Luigi Bersani es la más votada, con el 32,21% de los sufragios, seguida de cerca por el centroderecha liderado por el ex primer ministro Silvio Berlusconi, con un 30,04% de apoyos.

Por detrás irrumpe el Movimiento 5 Estrellas de Grillo, el segundo partido con mayor apoyos por sí solo, con un 23,87% de votos, y en cuarto lugar, la lista centrista de Monti con un 9,18% de sufragios.

El resultado de la Cámara Alta es clave en Italia por la peculiaridad de su sistema electoral, que da el premio de mayoría a la coalición vencedora en un reparto región por región, con territorios como el de Lombardía (norte), que aporta casi una cincuentena de senadores y habitual caladero de votos del centroderecha.

lombardía con berlusconi Con dos tercios de las secciones electorales escrutadas, la coalición de Berlusconi se lleva el premio de mayoría de Lombardía, con un 38,18% de los votos, frente al 29,61% del centroizquierda de Bersani.

Estos resultados, junto a los de otras regiones, arrojan, según una simulación difundida por el canal de televisión por satélite Sky Tg24, un escenario en el que, con un total de 315 miembros electos, el centroizquierda conseguiría 104 escaños en el Senado, frente a los 123 del centroderecha de Berlusconi, 17 de Monti y 57 de Grillo.

Con una mayoría absoluta de 158 senadores, Bersani necesitaría buscar aliados y no le sería suficiente ni siquiera con los senadores de Monti, lo que puede traducirse en un bloqueo en este hemiciclo, donde parece poco probable que la antipolítica esté dispuesta a pactar con los partidos tradicionales.

Ya en 2006, el Gobierno de centroizquierda de Romano Prodi que salió de las urnas vivió una situación inestable (duró solo cerca dos años), con un Senado en el que tenía mayoría gracias al apoyo de los senadores vitalicios. En la Cámara de los Diputados, por el contrario, se perfila una mayoría clara para el centroizquierda, gracias al sistema de reparto en términos del conjunto del Estado del premio a la coalición más votada, que, con poco más de la mitad de las secciones escrutadas, es la formación de Bersani, con un 31,05% de los votos.

Por detrás en la Cámara Baja quedan el centroderecha de Berlusconi, con el 27,59; el Movimiento 5 Estrellas de Grillo, que en sus primeras elecciones legislativas obtiene por sí solo el 25,62% de los sufragios, y la coalición de Monti, con el 10,43 % de los apoyos.

Grillo, Euforia en la red Pero si el desplome de Monti ha sido una sorpresa la gran novedad de estos comicios ha sido la fuerte irrupción del partido de los antipolíticos. El avance electoral del Movimiento 5 Estrellas, liderado por el actor y cómico italiano, Beppe Grillo, que tanto en la Cámara baja como en el Senado alcanzaba alrededor del 25% de los votos se vio reflejado en miles de mensajes de festejo en las redes sociales. "Tomamos Roma", "Empezamos a celebrar en la red la victoria", "Estaremos en el fiel de la balanza" o "El resultado de Grillo estaba anunciado, quien se sorprenda no ha puesto el pie en la calle ni ha frecuentado internet en el último año", son algunos de las frases colgadas en las redes sociales. "La honestidad estará de moda", dijo Beppe Grillo en su primer tuit. Un fenómeno tsunami el de Grillo que ya se perfiló peligroso para sus contrincantes el pasado viernes, cuando concentró a 70.000 personas en una tarde desapacible en la plaza de San Juan de Letrán de Roma, mientras que otros candidatos celebraban sus mítines en teatros y hoteles. Grillo es el único político que ha recorrido Italia a bordo de una caravana para explicar sus propuestas como la de devolver "los cien millones de euros que nos tendrían que dar de reembolso electoral si entramos en el Parlamento".

A nivel nacional, el 40 % de las candidatas de la lista de Grillo son mujeres, una excepción con respecto a los demás partidos que se ha encargado de resaltar.

El nerviosismo por los resultados de las elecciones italianas pasó factura en la jornada bursátil de ayer a los principales parqués europeos. El Ibex español se disparó un 2,5% tras los primeros sondeos en Italia pero cambió su tendencia alcista hacia el final de la jornada bursátil y acabó cerrando con una subida de un 0,8%, en 8.244 puntos. Por su parte, el Dax de la Bolsa de Fráncfort redujo sus fuertes ganancias del principio del día tras el cierre de los colegios electorales en Italia y acabó cerrando con una ligera subida de un 1,45%, hasta situarse en los 7.773,19 puntos. También el EuroStoxx 50 de París registró una fuerte subida al inicio que llegó a situarlo cerca de los 2.700 puntos. Sin embargo, al final acabó subiendo un leve 0,83%, hasta quedarse en los 2.651,86 puntos.

Por su parte, el índice de la Bolsa de Milán FTSE MIB, que llegó a aumentar por momentos un 4,0%, cerró con una subida de un 1,43%. El euro subió ayer hasta llegar hasta los 1,3196 dólares, frente a los 1,3168 dólares de la jornada anterior. Mientras, el Banco Central Europeo fijó el cambio oficial del euro en 1,3304 dólares. El corredor de Bolsa Joe Rundle, de ETX Capital, basó la fuerte subida de un 4,0% en los primeros pronósticos que daban la ventaja para la alianza de centro-izquierda de Pier Luigi Bersani.

"La victoria de Bersani es vista como el mejor escenario posible por los inversores", comentó.

Las proyecciones que apuntaban a que la coalición de centro-derecha del ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi iba al frente en la elección del Senado frenó en seco a las bolsas al final del día.

Por otro lado, las elecciones de este domingo y lunes registraron una caída en la participación de 5,33 puntos porcentuales con respecto a los comicios de 2008, situándose la afluencia de voto para la Cámara de los Diputados en el 75,17%.

Según los datos divulgados por el Ministerio del Interior italiano, esa afluencia a estas elecciones, en las que también se votó en clave regional en Lombardía, Lacio y Molise, es menor que el 80,5% registrado en la Cámara Baja en los comicios generales de abril de 2008, celebrados en primavera.

En cuanto al Senado, para el que solo podían votar aquellos de entre los más de 50 millones de personas que componen el electorado nacional con al menos 25 años de edad, la afluencia fue del 75,19%, 5,27 puntos menor que el 80,46% de los comicios de 2008.

En términos generales, los porcentajes de participación más altos se registraron en el norte del país, a pesar del mal tiempo, sobre todo en Lombardía, región clave, para el Senado por la gran cantidad de escaños que aporta y tradicional caladero de votos del centroderecha.

La ministra del Interior en funciones, Anna María Cancellieri, quien cifró en los 390 millones de euros el coste para el Estado de estas elecciones, dijo ayer en comparecencia ante los medios tras cerrar los colegios que el mal tiempo puede haber desanimado a algunos italianos a no acudir a los colegios electorales, pero no en esa proporción.