washington. El presidente de EEUU, Barack Obama, llamó a la acción en su discurso del Estado de la Unión para impulsar el crecimiento económico, rescatar a la clase media y hacer realidad una agenda progresista que incluye la reforma migratoria, el control de las armas y el combate al cambio climático. En la primera intervención ante el Congreso de su segundo mandato, centrada en la economía y en asuntos domésticos, Obama anunció también la salida de 34.000 soldados de Afganistán en un año y el inicio de negociaciones con la UE para una zona de libre comercio, y prometió firmeza contra las amenazas nucleares de Corea del Norte.

La "tarea pendiente" tras haber "despejado los escombros de la crisis" es lograr un gobierno no más grande, sino "más inteligente", que "trabaje en nombre de la mayoría, no de unos pocos", manifestó el presidente. "Una economía en crecimiento que cree buenos empleos para la clase media: ésa debe ser la estrella polar que guíe nuestros esfuerzos", subrayó al alertar de que los beneficios empresariales "se han disparado a máximos" mientras "desde hace más de una década los salarios e ingresos apenas se han movido".

Obama expresó su deseo de que "la próxima revolución manufacturera sea Hecho en Estados Unidos", al anunciar la creación de tres nuevos centros de innovación manufacturera para que el país sea "un imán para nuevos empleos".

subir el salario mínimo Además, pidió al Congreso que apruebe una subida del salario mínimo progresivamente hasta los 9 dólares a la hora en 2015, frente a los 7,25 actuales, y planteó el objetivo de erradicar la pobreza extrema en el mundo en las próximas dos décadas, con el compromiso de empezar a trabajar para cumplirlo.

Para el crecimiento de la clase media, los estadounidenses "deben tener acceso a la educación y la capacitación que exigen los empleos hoy en día", argumentó Obama al proponer más inversiones para ampliar el acceso a programas preescolares de "alta calidad". La apuesta por la educación y las energías limpias es una pieza clave del plan económico presentado por el presidente, quien también instó a los congresistas "a dejar los intereses partidistas a un lado" y trabajar "por un presupuesto que reemplace los recortes insensatos con ahorros inteligentes y sabias inversiones en el futuro".

La reducción del déficit público en la que llevan meses enfrascados demócratas y republicanos "no es por sí sola un plan económico", advirtió Obama al reiterar la necesidad de una reforma del sistema impositivo y de algunos programas sociales. La Constitución "no nos convierte en rivales por el poder, sino en socios por el progreso", dijo Obama citando al expresidente John F. Kennedy al inicio de su discurso para poner el énfasis en que hay que actuar en muchos temas y él está dispuesto a hacerlo.