El corazón de Damasco, la capital siria, volvió a ser ayer blanco de varias explosiones, registradas cerca de edificios militares, mientras las fuerzas del régimen intensificaron sus bombardeos contra los feudos rebeldes en el resto del país. La brigada del Ejército Libre Sirio (ELS) en Damasco señaló que "es una respuesta a las masacres cometidas por el régimen criminal".