kabul. Otros 18 civiles -incluidos mujeres y niños- fallecieron en una operación conjunta de tropas afganas y de la OTAN en la provincia de Logar, en el centro del país. El jefe de la Policía provincial, Ghulam Sakhi Rogh Liwanai, dijo que las víctimas habitaban una casa de la localidad de Sajawand que fue atacada de madrugada por fuerzas aliadas bajo la sospecha de que servía de refugio a un dirigente talibán identificado como Qari Sardar.

De acuerdo con la fuente, la ISAF empleó fuerza aérea en la operación armada, en la que murieron además doce insurgentes y resultaron heridos tres soldados del contingente internacional.

Un portavoz de la ISAF, el teniente James Williams, reconoció la existencia del ataque, pero afirmó no poder confirmar la muerte de civiles durante la operación. "Sabemos que hay alegaciones sobre lo ocurrido en el incidente armado", se limitó a decir.

El principal portavoz talibán, Zabiulá Mujahid, negó, por su parte, que en la zona residiera ningún líder insurgente. "No tenemos ningún dirigente con el nombre de Qari Sardar", dijo Mujahid, contactado telefónicamente desde Kabul, antes de añadir desde algún lugar desconocido que "el enemigo tiene por costumbre matar civiles y luego decir que eran talibanes".

En la guerra afgana, que ya dura más de una década desde la invasión EE.UU. a finales de 2001, los civiles se han destacado como un colectivo muy vulnerable a las acciones de ambos bandos.

en 2011 murieron 3.021 civiles El número de civiles muertos en 2011, un total de 3.021, fue el más elevado desde que hace cinco años la misión de la ONU en Afganistán (UNAMA) comenzara a registrar este tipo de datos. Pese a ello, la UNAMA informó recientemente de que la cifra de víctimas civiles por el conflicto ha disminuido un 21% en el primer cuatrimestre del presente año respecto al mismo periodo del año anterior. En este último parte, el organismo atribuyó un 79% de víctimas a acciones perpetradas por los grupos insurgentes -sobre todo atentados suicidas y bombas camineras- y un 12% a las fuerzas afganas e internacionales.

La anterior jornada más negra para los civiles en Afganistán tuvo lugar en diciembre de 2011, cuando un doble atentado suicida de corte sectario segó la vida de 62 personas en Kabul y la ciudad septentrional de Mazar-i-Sharif. Y, en septiembre de 2009, un bombardeo de la ISAF cerca de la ciudad de Kunduz causó la muerte de más de 70 civiles.

Las tropas de la OTAN comenzaron el pasado julio a retirarse de manera gradual de Afganistán y a transferir la competencia de la seguridad a las fuerzas de este país en un proceso que debe concluir en 2014, si se cumplen los plazos previstos.