Un jubilado se quemó ayer a lo bonzo en Kelaât Sraghna, a 80 kilómetros de Marraquech, en la sala del Tribunal de Primera Instancia de esta ciudad y su estado es crítico, informó la agencia MAP. Según la agencia, el hombre se roció de gasolina y después se dirigió a una sala del tribunal donde se prendió fuego.