ESTRASBURGO. El pleno del Parlamento Europeo ha propuesto este miércoles "congelar" las dietas que recibirán sus diputados en 2012, pero ha dejado fuera una enmienda que apostaba por ir más allá y reducir hasta un 25 por ciento una de estas dietas, la asignación que recibe cada uno de ellos para gastos de oficina.

Los eurodiputados han votado a favor de "congelar" la asignación de 4.300 euros que recibe cada uno de ellos para gastos administrativos y de oficina y de mantener también en los mismos niveles de este año otras dietas que reciben como, por ejemplo, una diaria de 300 euros.

Esta decisión forma parte de la posición que defenderá la Eurocámara en sus negociaciones con el Ejecutivo comunitario y los Veintisiete para los presupuestos de la Unión Europea del próximo año. El texto plantea aumentar el gasto comunitario en un 5,2 por ciento --en línea con lo que propone Bruselas, pero en contra de la austeridad que pide el Consejo--, y pide un incremento del 1,4 por ciento de la partida reservada para la Eurocámara.

Los eurodiputados, además, apoyan recortar el gasto que el Parlamento destina a determinados costes de traducción e interpretación, lo que se traduciría, por ejemplo, en no traducir a todos las lenguas oficiales determinados documentos de uso interno.

Con este voto, ha quedado fuera otra enmienda impulsada por el eurodiputado portugués Miguel Portas (Izquierda Unitaria) para reclamar un recorte de hasta el 25 por ciento en la dotación para gastos de oficina y representación.

El español Willy Meyer (IU), que respaldó a Portas en su enmienda, ha considerado "lamentable" que la Eurocámara "imponga" a los trabajadores una política de austeridad que "luego es incapaz de aplicarse a sí mismo". La propuesta de presupuesto del Parlamento "no hace frente a la mayor crisis política de la Unión Europea", advierte el eurodiputado en un comunicado.