BRUSELAS. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, envió una carta al presidente francés, Nicolás Sarkozy, y al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, en la que les indicaba estar dispuesto a aceptar su petición de restringir la libre circulación de personas en el espacio Schengen y a permitir el restablecimiento "temporal" de las fronteras interiores en la UE.
Sarkozy y Berlusconi reclamaron al Ejecutivo comunitario una reforma del acuerdo de Schengen tras su disputa por la negativa francesa a permitir la entrada de inmigrantes tunecinos a los que Italia dio un permiso temporal.
En su misiva de respuesta, Barroso confirmó que la Comisión está examinando el "refuerzo" de las reglas que gobiernan el acuerdo Schengen y que "próximamente" presentará propuestas en este sentido.
También reclama a los Gobiernos que alcancen un acuerdo para reforzar el sistema de asilo europeo, bloqueado en el Consejo de Interior de la UE desde hace meses, antes de 2012, y agradece el apoyo de Francia e Italia.