roma. El proceso contra el primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, acusado de abuso de poder y de incitación a la prostitución de menores en el llamado caso Ruby comienza hoy en la IV Sección Penal del Tribunal de Milán con la ausencia del imputado, quien prepara su escudo ante los magistrados. También se descarta la presencia de la joven de origen marroquí Karima El Marough, conocida como Ruby Robacorazones, pues sólo comparecerá cuando sea citada.
El tribunal estará presidido por Livia Pomodoro y compuesto por las juezas Giulia Turri, Carmen D'Elia y Orsola De Cristofaro, el fiscal jefe Edmondo Bruti Liberati y los fiscales Ilda Bocassino, Pietro Forno y Antonio Sangermano, sin que acudan los dos letrados más importantes del acusado.
Sin embargo y a pesar de los 110 medios de comunicación nacionales e internacionales acreditados para la vista, la audiencia de hoy no hará más que clasificar los datos y establecer los calendarios del proceso, en el que han sido propuestos 220 testigos de la acusación y de la defensa.
La Fiscalía acusa a Berlusconi de inducción de prostitución de menores en base a que Ruby mantuvo relaciones sexuales con él en trece ocasiones en Villa San Martino en Arcore, cerca de Milán, entre el 14 de febrero y el 2 de mayo de 2010, cuando todavía era menor de edad y mediante pago.
En cuanto al abuso de poder, la Fiscalía que ejerce la acusación, se fundamenta en la llamada telefónica que realizó Berlusconi el 27 de mayo de 2010 para sacar de una comisaría de Milán a la joven marroquí detenida por robo de 3.000 euros, con el argumento que era la sobrina del entonces presidente de Egipto, Hosni Mubarak.