"Este suceso es particularmente impactante por su amplitud y brutalidad", afirma la jefa de la delegación del CICR en Costa de Marfil, Dominique Liengme, en un comunicado divulgado en su página web.

El CICR "condena los ataques directos contra civiles y recuerda la obligación de las partes en el conflicto de garantizar en todas las circunstancias la protección de la población en el territorio que controlan".

Partidarios del presidente electo, Alassane Ouattara, y del saliente, Laurent Gbago, mantienen desde hace meses un conflicto que se ha recrudecido en los últimos días, en los que se han intensificado los combates y se han registrado numerosas víctimas mortales, aunque se desconoce la cifra.

Miembros del CICR y voluntarios de la Cruza Roja marfileña se desplazaron en los dos últimos días en la zona para conocer las necesidades de la población y recoger testimonios sobre lo sucedido, según la nota.

Allí, trasladaron 28 cadáveres hasta la morgue local en una operación que continuará en los próximos días.

EL CICR asegura, además, que decenas de miles de mujeres, niños y hombres han huido de los combates y los saqueos que se desarrollan desde el pasado lunes en Duekoue, una ciudad ya duramente castigada por la violencia en numerosas ocasiones.

Costa de Marfil vive una guerra civil después de que Gbagbo no haya aceptado entregar el poder a Ouattara, reconocido internacionalmente como vencedor de los comicios presidenciales de noviembre pasado.