Madrid/nueva york. La Liga Arabe ha suspendido la participación de Libia en sus reuniones con efecto inmediato y en respuesta a la represión contra los opositores que llevan días manifestándose contra el régimen de Muamar Gadafi, informaron las cadenas de televisión Al Yazira y Al Arabiya.
La decisión de la Liga Arabe llegó horas después de que el representante libio ante esta organización, Abdel Moneim al Huni, presentase su dimisión, no sin antes lanzar una dura crítica contra la actuación del régimen y reclamar el procesamiento de las autoridades de Libia. La salida de Al Huin se suma a las reacciones de otros diplomáticos libios que han mostrado su apoyo al pueblo libio en su lucha contra el régimen y han abandonado a Gadafi. Se trata, además de Al Huin, de los jefes de las misiones libias en Estados Unidos, Polonia, India, Indonesia, Australia, Malasia y Francia.
Por su parte el Consejo de Seguridad de la ONU se reunió ayer de urgencia en dos veces para abordar con todos los países miembros la crisis en Libia. Fuentes diplomáticas europeas indicaron que tras las intervenciones en el Consejo, que tuvo lugar a puerta cerrada pero que se abrió a la presencia de los 192 países miembros del organismo, se analizó un texto del Reino Unido para consensuar una declaración. "Se busca una firme condena del uso de la violencia" en el país magrebí, confirmaron.
Mientras, Gadafi ve como sus apoyos internacionales van desapareciendo. Hasta el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, al que definía como su "amigo", le reclamó ayer que cese inmediatamente la represión. Il Cavaliere, en una entrevista telefónica, reclamó al aún líder libio una "solución pacífica a la situación crítica que atraviesa el país para que la revuelta popular no degenere en una guerra civil".