MADRID. Los excarcelados cubanos acogidos en España desde el pasado mes de julio han afirmado sentirse también ganadores del premio Sajarov que el Parlamento Europeo entrega hoy a Guillermo Fariñas al suponer un reconocimiento a toda la disidencia y a todos los que defienden la libertad en la isla.
"Es un premio a la rebeldía del pueblo cubano y nosotros también representamos esa rebeldía", ha manifestado José Luis García Paneque resumiendo el sentimiento del medio centenar de ex presos políticos que salieron de Cuba en el marco de las excarcelaciones acordadas entre el régimen castrista y la Iglesia cubana.
García Paneque, en declaraciones a Efe, ha afirmado que el premio Sajarov "reconoce a todo un movimiento" en la figura de Fariñas, quien estuvo 135 días en huelga de hambre para exigir la salida de la cárcel de los disidentes enfermos.
Ha lamentado que el Gobierno cubano no le haya permitido viajar para recoger el premio, pero se ha mostrado convencido de que en Estrasburgo "estará el pueblo cubano" y será "emocionante para todos".
Antonio Ramón Díaz ha comparado el galardón a Fariñas con el Premio Nobel de la Paz al disidente chino Liu Xiaobo, quien tampoco pudo recibirlo en persona la pasada semana por la negativa de las autoridades de Pekín.
"Es una muestra de que son dos regímenes totalitarios. No hay libertad en Cuba y no hay libertad en China", ha dicho a Efe Díaz.
A su juicio, cualquier galardón concedido a un disidente anticastrista "es un premio a todo el pueblo cubano".
Díaz ha subrayado que el premio Sajarov es un mensaje firme del Parlamento Europeo de que "en Cuba sigue habiendo una flagrante violación de los derechos humanos".
Léster González, otro de los excarcelados acogidos en España, ha convenido en que se trata de una distinción colectiva.
"Nos sentimos como si fuésemos parte del premio, porque el propio Fariñas lo ha querido compartir", ha señalado.
Para González, el no haberle dejado recoger el galardón demuestra que el régimen castrista "sigue siendo una dictadura" y que no es sincera su propuesta de introducir reformas.
Julio César Gálvez ha agradecido a Fariñas su sacrificio para que medio centenar de presos políticos pudieran salir de prisión, aunque fuera con la condición de ser desterrados a España.
Gálvez también ha hecho partícipes de esta lucha al colectivo de las Damas de Blanco y al también disidente Orlando Zapata, fallecido el pasado mes de febrero después de 85 días en huelga de hambre.
Como otros excarcelados, Gálvez estaba invitado a asistir a la ceremonia de entrega del premio Sajarov 2010 a la libertad de conciencia, pero no ha podido hacerlo al no disponer del pasaporte por haber solicitado el estatuto de refugiado político en España, lo que le impide viajar al extranjero.
La Oficina de Refugio y Asilo del Gobierno les había advertido de que tendrían que comenzar de cero sus trámites para ser asilados en caso de devolverles el pasaporte, según Gálvez.
Este organismo sí hizo una excepción el pasado mes de septiembre cuando varios ex presos políticos pudieron recuperar por unos días su pasaporte para viajar a Bruselas invitados por el Parlamento Europeo con el fin de reunirse con varios eurodiputados.