la haya. La comisión que investiga los abusos sexuales a menores por parte de religiosos en Holanda anunció ayer que ha recibido un total de 1.975 denuncias, a la vez que criticó el funcionamiento de la entidad creada por la Conferencia Episcopal para ayudar a las víctimas.

Así lo indicó ayer el presidente de esa comisión, el exministro Wim Deetman, de religión protestante, en la presentación de un primer informe centrado en cómo mejorar la ayuda a las víctimas de abusos por parte de religiosos.

Esta comisión independiente, que fue creada por la propia Iglesia católica en marzo pasado tras numerosas denuncias de abusos por parte de religiosos, tiene previsto presentar su informe final en 2011.

Además, la Iglesia católica en Holanda ha ordenado una segunda comisión independiente, presidida por un catedrático de Derecho de la Universidad de Rotterdam, Siewert Lindenbergh, para que le aconseje sobre los pasos jurídicos para compensar a las víctimas.