RABAT. Un testigo ocular de los hechos, que pidió permanecer en el anonimato por temor a represalias, aseguró por vía telefónica que al menos 16 estudiantes han sido trasladados al hospital provincial de Esmara, mientras que fuentes españolas que residen en el Sáhara Occidental elevan esta cifra hasta 21.
El testigo presencial relató que la mayoría de los heridos son chicas que estudian en el centro educativo, y añadió que la policía marroquí ha establecido un perímetro de seguridad en torno al instituto.
Una fuente saharaui señaló a Efe que la disputa se originó después de que un marroquí intentase sacar una bandera de Marruecos junto al instituto, una acción que estudiantes saharauis intentaron impedir.
Otras fuentes, sin embargo, indican que la presencia de civiles marroquíes en el lugar obedecía a un rumor que se había extendido sobre la posible convocatoria por parte de los estudiantes saharauis de una manifestación dentro del instituto.
Las fuentes señalaron que no se han practicado detenciones, si bien este extremo no pudo ser confirmado.
Asociaciones de derechos humanos han criticado en los últimos días el "clima de odio" que reina en las ciudades del Sáhara Occidental tras el desmantelamiento el pasado 8 de noviembre del campamento saharaui de protesta de Gdaim Izik y los posteriores disturbios en la ciudad de El Aaiún, en los que murieron al menos 13 personas.
Esas mismas asociaciones han hecho hincapié en la desconfianza existente en la actualidad entre la comunidad saharaui y la marroquí después de la participación de civiles marroquíes en asaltos a hogares y comercios, y de la implicación de saharauis en la muerte de once policías -varios degollados- en los disturbios de El Aaiún.
Estos incidentes llegan apenas unos días después de que el rey Mohamed VI reemplazase el pasado viernes al "wali" (gobernador civil) de El Aaiún, Mohamed Jelmus, por el saharaui Jalil Djil, en un movimiento que ha sido interpretado como un intento de aproximar las posiciones y rebajar la tensión en la ex colonia española.