BRUSELAS. El pasado mes de septiembre, la máquina en la que jugaba el litigante marcó un premio por valor de 7.050.326 euros, pero al reclamarlo el casino le respondió que se trataba de un "error técnico", según dijo el abogado del jugador, Marc Uyttendaele, en declaraciones recogidas por el diario belga "Sudpresse".

El individuo jugó 0,5 euros en un juego llamado "Bonus Time", una cantidad para la que el mayor premio posible era de 800 euros en esa máquina, según afirmaron los responsables del centro de juegos de azar.

El casino argumentó que el premio máximo que puede lograrse en ese casino es de 5.000 euros, por lo que la cantidad de siete millones que supuestamente obtuvo el jugador está muy por encima de ese tope.

A pesar de ello, el abogado del jugador pidió el pasado viernes una congelación de cuentas "hasta que un juez decida sobre el caso", algo que en palabras del gerente del casino, Emmanuel Mewissen, es un "acto atroz", según recoge la agencia de noticias Belga.

"Este tipo de procedimiento sólo se utiliza cuando alguien trata de organizar su insolvencia. Ése no es nuestro caso", añadió Mewissen.

La dirección del centro, que lleva una semana en huelga por otras circunstancias, se enfrenta ahora a posibles multas por el impago de los salarios e impuestos derivados de los juegos de azar que debía abonar a finales de octubre, según "Sudpresse".

El casino espera que en breve se levante el bloqueo de sus cuentas, y anunció que va a denunciar los daños y reclamar intereses para cubrir las eventuales multas que el establecimiento deberá pagar por los retrasos en sus pago.