El pleno del Parlamento Europeo debatirá mañana sobre la situación de los gitanos en Europa, tras la polémica por las expulsiones de casi un millar de rumanos y búlgaros en Francia y mientras Bruselas examina la legalidad de las medidas adoptadas por Sarkozy. El debate se incluyó en la agenda por la "preocupación" de la mayoría de eurodiputados por la situación de la población gitana "en algunos Estados miembros", según explicó el presidente de la Eurocámara, Jerzy Buzek.