LOS ÁNGELES. El magistrado Vaughn Walker consideró que la Proposición 8, aprobada en referéndum en noviembre del 2008 en California y que reformó la Carta Magna del estado para definir matrimonio como un enlace entre un hombre y una mujer, es inconstitucional por ser incompatible con los principios de igualdad y proceso legal.

Instantes después de hacerse público el veredicto, la alegría se apoderó de un centenar de personas favorables a los enlaces entre homosexuales que se reunieron a la entrada de los tribunales federales en San Francisco, donde se dictó la sentencia.

Una emoción compartida en muchos lugares de California y del resto del país, en especial en las organizaciones de gays y lesbianas.

"Esta victoria es un hito", afirmó Lorri L. Jean, directora ejecutiva de L.A. Gay & Lesbian Center, una declaración en la misma sintonía que la de Geoff Kors de Equality California, para quien la sentencia confirma que los derechos recogidos en la Constitución "son aplicables a todos".

De esa misma opinión es también el gobernador del estado, el republicano Arnold Schwarzenegger, para el que la resolución judicial supone "la completa protección legal y salvaguarda que todo el mundo merece".

El fiscal general de California y candidato demócrata a suceder a Schwarzenegger, Jerry Brown, se mostró igualmente satisfecho por la decisión de Walker, una visión que no comparte su rival electoral Meg Whitman, ex ejecutiva de la página de subastas Ebay, que siempre se ha manifestado en contra de los matrimonios entre homosexuales.

Muchos famosos utilizaron las redes sociales de internet para manifestar su alegría por la sentencia a favor de las bodas gays, como el puertorriqueño Ricky Martin, la millonaria Paris Hilton, o las actrices Elizabeth Banks y Alyssa Milano.

El veredicto, sin embargo, supuso un jarro de agua fría para los grupos conservadores y religiosos de California, donde en noviembre del 2008 la mayoría de la población votó a favor de definir el matrimonio como un enlace solo posible entre un hombre y una mujer.

"Es un golpe terrible", afirmó el presidente de la organización Save California, Randy Thomasson.

"El juez ha impuesto su propio orden homosexual a los electores, los padres y los niños de California" dijo Thomasson, quien insistió en que la Constitución de EEUU "garantiza que las políticas estatales las hace la gente, no los jueces".

Desde la National Organization for Marriage, su presidenta Maggie Gallagher criticó la sentencia de "un juez abiertamente gay" que "substituyó el punto de vista de los estadounidenses y de los Padres Fundadores por el suyo".

La iglesia mormona, contraria a los enlaces entre personas del mismo sexo, lamentó el veredicto y recordó que por dos veces los jueces han sentenciado en contra de lo que los californianos con sus votos aprobaron en las urnas, "que el matrimonio debería ser reconocido solo entre un hombre y una mujer".

El juez Walker aplazó cualquier efecto de su sentencia sobre las leyes de California hasta el viernes, plazo que concedió a los promotores de la Proposición 8 para recurrir y pedir que se posponga la concesión de nuevas licencias de boda a personas del mismo sexo hasta que falle la Corte Federal de Apelaciones.

Todo apunta a que el caso terminará en manos de la Corte Suprema de EEUU, la última instancia judicial del país.