MADRID. El teléfono de la embajada de Irán en el Estado no para de sonar los jueves por la mañana, llegando a colapsar la línea, para apoyar a Nemat Safavi, el joven iraní que lleva tres años en la cárcel de su país condenado a muerte por su condición de homosexual, han informado fuentes de la embajada.
La iniciativa, "Jueves por Nemat", consiste en que todos esos días de la semana, entre las 9.00 y las 14.30 horas, las personas sensibilizadas por la causa llaman, envían faxes y correos electrónicos a las embajadas de Irán en varios países para preguntar por el estado de Safavi y reivindicar su causa.
En la embajada no saben cómo está el joven y tampoco opinan sobre la sentencia de muerte a la que está condenado, pero lo que sí reconocen y se quejan es de que "la gente que llama para tramitar sus visados no puede hacerlo a menudo porque comunica".
La situación de Nemat Safavi ha llegado a las redes sociales: Facebook se ha solidarizado con el joven iraní y 9.000 miembros forman parte del grupo llamado "Apoyo a Nemat Safavi", en el que uno de sus seguidores propone llevar el tema al programa "Gran Hermano" para darlo a conocer, ya que, "su emisión se realiza los jueves y en los últimos años han particpado homosexuales".
También hay un blog ("Historia real de ciencia ficción") donde se pueden conocer las novedades de la situación del joven y a través del que se convocan los actos y concentraciones "para salvar la vida de Nemat Safavi", la última de las cuales tuvo lugar el pasado 5 de noviembre en Castellón.
Los organizadores de la campaña van más allá de las llamadas telefónicas y de la propaganda por internet y están manteniendo contactos con los grupos políticos con el objetivo de llevar este asunto al Parlamento español para que "el gobierno presione a Irán e impida la ejecución de Safavi".
Hasta ahora, Amnistía Internacional, la ONU, el Parlamento Europeo y la Premio Nobel de la Paz Chirine Abedi han solicitado a Irán sin éxito el cese de las ejecuciones de menores.
A través del informe "Irán, el último verdugo de menores", publicado en 2007, Aministía Internacional expone diferentes casos que, como Nemat Safavi, entraron a la cárcel siendo menores de edad y están condenados a muerte.
Irán tiene el "honor" de haber ejecutado a más personas menores de edad en el momento del delito que cualquier otro país del mundo desde 1990, según la información de que dispone Amnistía Internacional.
Mientras esperan la mayoría de edad en la cárcel para ser ejecutados, algunos ganan recursos contra su sentencia condenatoria, otros quedan en libertad tras la celebración de un nuevo juicio y al resto sólo le queda pagar su libertad o aceptar la muerte, indica el informe de Amnistía.
Nemat Safavi, culpado de sodomía, espera no estar dentro del último grupo, del que espera la muerte, y aguarda que el Tribunal Supremo ratifique la sentencia de un tribunal de Ardabil, en el Azerbayan iraní, que lo condena a muerte.
Todo esto sucede pese a que Irán tiene firmados dos acuerdos internacinales comprometiéndose a proteger a los menores y a no condenar a muerte a personas que fueran menores en el momento de cometer el delito en cuestión, explica Maria Claudia Cambi, coordinadora del grupo facebook de Safavi.
Su historia no es un caso aislado: en los últimos 30 años el régimen de los Ayatollah ha "asesinado" a 4.000 gays, lesbianas y transexuales en Irán, explican los organizadores de la campaña para salvar al joven.