“Compremos California a Trump”. Resulta que hay algún danés o un grupo de ellos –se desconoce quién está detrás de la iniciativa– decidido a responder con chufla y cachondeo al declarado propósito de Donald Trump de hacerse con Groenlandia. Y ha montado una web que asegura haber recabado ya más de 210.000 firmas. “¿Alguna vez has mirado un mapa y has pensado: ¿sabes lo que necesita Dinamarca? Más sol, palmeras y patines”. Bueno, tenemos una oportunidad única en la vida de hacer realidad ese sueño. ¡Comprémosle California a Donald Trump! Sí, escuchaste bien. California podría ser nuestra y necesitamos tu ayuda para hacerlo realidad”. ¿Y por qué California y no Utah, por ejemplo? Lo tienen claro: además del sol está el “dominio tecnológico: ¿obtener un grupo extra de tech bros? ¡Excelente! Es lo que toda democracia necesita”. Por otra parte, continúan, “California produce el 90% de los aguacates de EEUU, nunca nos quedaremos sin tostadas de aguacate”. ¡Ah! y está Disneyland: “Le cambiaremos el nombre por Hans Christian Andersenland. ¿Mickey Mouse con casco vikingo? Sí, por favor”. Y cuidado, recurrirán a sus “mejores negociadores: los ejecutivos de Lego y el elenco de Borgen”. Prometen carriles bici en Beverly Hills y, de paso, Estado de derecho, atención sanitaria universal y política basada en hechos. Todo ventajas.
