- Aunque parezca el pleistoceno, fue solo hace una semana. Sánchez arreó un revolcón a su gobierno y en Diestralandia cantaron victoria. ¿De quién? De la emperatriz de la Puerta del Sol. "Ayuso precipitó el cambio", cacareaba José Alejandro Vara en Vozpúli, antes de adornarse así: "Sánchez tembló. La estruendosa victoria de Isabel Díaz Ayuso se tradujo en pavor en los despachos de la Moncloa. Una niebla de pánico se instaló por los rincones, nubló las mentes y acochinó los espíritus, hasta entonces desafiantes. El 4-M le forzó a cambiar de planes, a mudar drásticamente su estrategia".
- La frialdad con que el presidente español ejecutó la escabechina de su gabinte fue también motivo de calificativos de alto octanaje. Rubén Amón le llamó vampiro en El Confidencial, pero fue Jesús Cacho, de nuevo en Vozpópuli quien ganó la puja: "Concedidos los indultos a los condenados del procés a un precio muy alto para el personaje, con un desgaste de imagen brutal, Pedro Sánchez, que como buen psicópata carece de sentimientos, se embarcó ayer en un cambio de Gobierno acompañado por un gran aparato eléctrico con mucha pirotecnia de rayos y truenos".
- La gran alegría de la semana en el ultramonte ha sido la sentencia del TC que declara ilegal el confinamiento. "Sánchez debe dimitir y Casado y Arrimadas, pedir disculpas", gritaba un editorial de Libertad Digital que olvidaba cómo Abascal también reclamó el estado de alarma. El remate de la pieza está entre lo épico y lo patético: "Y es que, a pesar de las formidables pulsiones totalitarias del Gobierno, no todo estará perdido si en España quedan tribunales de justicia dignos de tal nombre".
- El exministro de la triste figura y principal implicado de la Kitchen, Jorge Fernández Díaz, no olvidaba en sus hurras el agradecimiento a Vox ni el tirabuzón cubano: "Es de destacar que este importante pronunciamiento haya sido posible gracias al recurso interpuesto por Vox, único grupo en hacerlo, cuando el PP también debería haber estado ahí. La calidad de una democracia tiene su clave de bóveda en la garantía de los derechos fundamentales. Una buena noticia para nuestra democracia: Cuba ya no es España", anotaba en La Razón el tipo que está acusado de ordenar un operativo parapolicial para eliminar pruebas contra su partido.