La de esta semana es una familia nada habitual. Y es que además de ser una familia numerosa con cuatro hijos, lo que ya de por sí es poco frecuente, tienen un arsenal de copas y medallas de sus padres, Carlos Gallués, atleta especializado en Ironman, y Ruth Cuesta, subcampeona del mundo en Bikini Wellness. Carlos lleva muchos años corriendo, primero haciendo carreras de montaña y luego triatlón, pero Ruth hace sólo cinco años, con 40, cuando comenzó a desarrollar su afición por el deporte. 

“De los 30 a los 40 años he estado dando a luz y criando a nuestros cuatro hijos, pero luego comencé con el crossfit y hace año y medio con el mundo del fitness y del culturismo”, explica. Su meteórica carrera ha sorprendido mucho entre su familia y amigos, pero sus hijos, que cómo no puede ser de otra manera son sus mayores fans, sabían que iba a alcanzar la cima. “Ha estado esforzándose muchísimo·y sabíamos que lo conseguiría”, aseguran con orgullo. Visitamos a Ruth Cuesta, su marido Carlos Gallués y sus hijos, Paula (13 años), Álex (11), Erik (9) y Marco (7) en su casa en Cizur Menor para felicitarle y conocer más de cerca su rutina familiar y deportiva.

Ruth Cuesta y Carlos Gallués con sus cuatro hijos: Paula, Álex, Erik y Marco. Javier Bergasa

En vuestra familia el deporte es una auténtica pasión, ¿es así?

Ruth y Carlos: Sí.

¡Sois muy deportistas en esta casa entonces!

Ruth: ¡Sí! Yo empecé con el deporte de forma tardía, hace cinco años, con 40, después de tener a nuestro cuarto hijo porque de los 30 a los 40 años me los pasé criando a nuestros hijos (sonríe). Y luego me animó mi marido a empezar con el crossfit y a raíz de eso me cambió la vida por completo y el deporte, desde entonces, ha formado ya parte de mi vida.

¿Qué deporte practicas?

Ruth: Hace ya dos añitos que me dijeron que me veían posibilidades en el culturismo y mi marido ha sido el que más me convenció diciéndome que me veía la capacidad y las posibilidades de hacer algo. Por eso buscamos a un preparador para ponerme en forma y, en año y medio me dijo que ya estaba lista para salir a tarima. Claro, yo llevaba ya una buena base de cinco años en crossfit y algo de genética, que también ayuda (sonríe).

Llevas, por tanto, poco más de un año, pero ya has conseguido llegar a lo más alto.

Ruth: Sí, bueno… He participado ya en tres competiciones prácticamente seguidas porque tampoco puedes estar manteniendo ese físico mucho tiempo porque estás con un déficit calórico alto y estás muy cansada. Fui al Campeonato de España y quedé quinta. A las tres semanas fui a un clasificatorio para el Campeonato Mundial y ahí me quedé segunda y ya me fui con la selección española a mitad de noviembre a Praga, al Campeonato del Mundo, y ahí he quedado segunda.

¡Casi nada!

Ruth: La verdad es que para llevar un año compitiendo estoy muy contenta porque no me lo esperaba…

Año y medio puede parecer poco tiempo pero tiene que ser un sacrificio bestial…

Ruth: Sí porque es entrenar mucho. Y todo eso lo tienes que compaginar con el trabajo y con la familia, claro. Además, en nuestro caso, somos una familia numerosa, con cuatro hijos, y hay que ser muy disciplinado. 

Carlos: Mucha disciplina con los ejercicios, pero también con las dietas.

¿Es difícil compaginar el menú de los niños con el tuyo?

Ruth: Sí porque me llevo mis tuppers con mi comida porque tengo que comer cada tres o cuatro horas. Las vacaciones pasadas, de hecho, tuvimos que ir de camping para poderme hacer yo mi comida porque sí, tienes que modificar muchas cosas del día a día familiar pero es que es la única manera.

Carlos: Es que yo, en cambio, que hago Ironman, puedo comer todo lo que quiera y más porque lo quemo todo. Pero en el caso de ella, el culturismo limita mucho la vida social porque nuestra cultura está hecha en base a comer. Cuando no nos vamos a comer aquí, nos vamos a tomar el vermú allá…

Ruth: Sí. Menos mal que me ayuda que mi marido sea deportista también y tengo la suerte de que los niños lo entienden. Fácil no es y tenemos que hacer malabares mi marido y yo. 

Carlos: Entrenamos antes de ir a trabajar y nos vamos intercambiando los dos.

Ruth: Sí porque luego los críos tienen el cole y sus actividades extraescolares y hay que llevarles y recogerles, así que fácil no es , lo que pasa es que cuando te gusta algo sacas el tiempo de donde haga falta e intentas organizarte como puedes.

¿En qué categoría de culturismo te presentas?

Ruth: En bikini wellness. Estoy más musculada que una bikini y tengo más masa muscular en pierna y glúteo. Es una categoría nueva que han puesto este año.

¿Y cómo se vive con una madre que es subcampeona del mundo? Sería para vosotros todo un orgullo cuando llegó a casa con las medallas, ¿no?

Álex: Pues sí, estamos muy contentos y muy orgullosos de ella (sonríe).

¿Os lo esperabais?

Paula: Pues a ver, yo sí me esperaba que iba a quedar de las primeras porque había estado todo el año trabajando un montón, así que sabía que iba a quedar muy bien. Tenía la intuición.

Erik: ¡Yo también!

Álex: Pero que quedase subcampeona del mundo eso sí que no nos lo creíamos.

Ruth: ¡Hombre, es que eso no me lo creía ni yo! (risas) La verdad es que hasta que no vinimos aquí de vuelta no fui muy consciente de ello pero al llegar aquí me llamaron del Diario de Noticias de Navarra y de otros medios y hasta que no ves la repercusión no eres consciente de lo que has hecho.

Erik: ¡Hasta salió en la tele!

Ruth: ¡Sí, es verdad! (sonríe).

¿Y con qué te quedas de ese sacrificio? Ha merecido la pena finalmente, ¿no?

Ruth: ¡Por supuesto! Ahora esperemos que se les pegue algo porque creemos que el deporte aporta unos valores y eso para los críos es muy importante, que vean lo que es el trabajo, la disciplina y la constancia, que vean que las cosas no vienen solas, que se trabajan, y yo creo que eso es fundamental para su educación.

¿Y qué trayectoria deportiva has seguido tú, Carlos?

Carlos: A mí me dio por correr hace muchos años y hacer carreras de montaña antes que no estaban tan de moda, en 2006. No era tan popular como ahora. Antes, hacer una carrera de montaña de 30 kilómetros ya era una carrera larga. Ahora claro, si no son 100 u 80 kilómetros no vale. Y de hecho, en las carreras de montaña a las que iba siempre con mi amigo Rubén, al acabar nos daban siempre de comer en los pueblos a los que íbamos porque había un ambiente muy familiar, pero llegó el tema de las marcas patrocinadoras y cambió totalmente. De hecho, la última carrera que hice fue la Camille Xtreme en 2010, que fue campeonato de España. Era de 32 kilómetros y ya era una carrera severa. Ganó Tòfol Castanyer, que aún está en activo, de hecho. 

¿Y después?

Carlos: Luego me pasé al triatlón y empecé con triatlón con distancia Ironman en 2012, hace diez años ya. Este año me gustaría ir al campeonato del mundo en Hamburgo. He hecho Múnich, Niza, Barcelona, Cascais, Madrid… Y este año toca el 4 de junio en Alemania. A ver si me clasifico para el Mundial, porque cumplo 44 años y estoy en el segmento de 40 a 44 años. Y claro, sólo los veinte primeros van al Mundial y estamos hablando de que en esa franja igual nos presentamos 400 personas, así que es complicado. Sobre todo con los alemanes y los nórdicos, que le pegan mucho. Entonces ahí vamos… 

“De los 30 a los 40 años he estado criando a nuestros 4 hijos, pero luego me he centrado en el deporte”

Ruth Cuesta - Educadora infantil

¿Ves posibilidades?

Carlos: Bueno… Competiré para el Europeo y a ver si me clasifico para el Mundial (risas)... Si cayera la carrera en septiembre, que es cuando hago 45 años, sería mejor porque así entraría en la franja de 45 a 50 (sonríe). Pero bueno, que lo mío es una afición, sin más pretensiones…

Bueno, pues contadnos un poco cuáles son vuestras aficiones, no sólo deportivas sino de cualquier otro tipo…

Paula: A mí me gusta mucho dibujar. De deporte hago crossfit, aunque he hecho más cosas, como atletismo, patinaje y taekwondo.

Ruth: ¡Completa que es la niña! (sonríe)

Álex: Mis aficiones son los deportes, que me gustan mucho. ¡Sobre todo me gusta mucho el Osasuna!

Ruth: Ya le podéis ver con la equipación que va vestido… (risas).

Álex: Y también de extraescolares he hecho taekwondo y ciclismo y ahora mismo estoy haciendo crossfit y futbito en el colegio.

¿Cuál es tu jugador favorito?

Álex: Pues para mí Chimy Ávila, delantero.

Carlos: ¡Qué raro! (risas)

Álex: Es que me gusta mucho cómo juega.

Eric: A mí también me gusta pintar.

Ruth: Hacen todos crossfit para niños, crossfit kids desde hace unos cuantos años. Allí entrenábamos su padre y yo y ellos también van allí. Van dos días por semana.

Carlos: Pero no le gustan mucho los deportes a Eric…

Ruth: No, yo creo que es el menos deportivo (risas).

Hombre, tiene que haber alguien que lleve la contraria, ¿no?

Carlos: A Eric le gusta mucho jugar a la Nintendo (sonríe).

Álex: Tenemos muchos juegos de Mario. También tenemos un juego que se llama Game Truck, que es de construcción, y por su cumpleaños le regalaron un juego de luchas y nos pasamos mucho tiempo jugando a él.

Marco: Yo también voy vestido del Osasuna, que es mi equipo favorito. Yo también he hecho crossfit y futbito y me gustan mucho los deportes también.

Ruth: Es muy movido y juega mucho.

Carlos: Y es un poco travieso (risas).

Ruth: También le gusta pintar.

Carlos: E ir al pueblo.

Ruth: Y no os ha contado la afición que tiene con el ajedrez. Es que en el colegio las matemáticas se las enseñan con el ajedrez, entonces saben jugar muy bien todos al ajedrez. Lo que no he conseguido yo nunca que es jugar al ajedrez ellos de maravilla y pasan muchas horas jugando con papá (sonríe).

¿Y cómo les habéis inculcado vuestra pasión por el deporte?

Ruth: Pues en una de las competiciones en las que he participado yo nos los llevamos para que viesen también un poco en qué consistía lo que yo hacía y también hemos intentado llevarles a algunas carreras de Carlos también.

Carlos: Sí. Recuerdo que en el Ironman que hice en Barcelona Álex corrió el Ironkids que hacían para los niños (sonríe).

Ruth: Si podemos vamos, porque claro, Carlos muchas veces compite fuera de España, entonces es complicado también poder moverse con los críos, pero allá que vamos siempre que podemos (sonríe).

¿A partir de qué edad pueden hacer crossfit los niños?

Ruth: Desde los 4-5 años que están los ‘pre-kids’ hay clases.

Carlos: De nuestros hijos el primero en empezar fue Álex con 7 años. Después de llevar cinco años con natación empezó con crossfit kids.

Ruth: Es que tenía mucha capacidad para nadar pero nos parecía muy joven aún para competir. Y como se le dan muy bien los deportes individuales le propusimos probar con otro.

Pero habrá que tener cuidado con el tema de pesos porque habrá determinados ejercicios que no puedan hacer…

Ruth: Eso es. Ellos no cogen pesos. En crossfit kids intentan hacer un poco de todo, pero son juegos para ir introduciéndoles en el mundo del crossfit, pero todo muy adaptado y medido con los críos.

Carlos: Nosotros vamos todos a Crossfit Runa, que está en Cordovilla, que es uno de los boxes más grandes de Europa. Allí cuidan muy bien a los críos.

Esta familia navarra es una apasionada del deporte. Javier Bergasa

¿Y si os preguntamos por un plan que os guste hacer en familia?

Ruth: Pues fíjate que con la pandemia se nos cortó mucho el tema de salir porque nosotros éramos de salir e intentábamos salir todos los fines de semana. Hacer planes para pasar el día en familia y salir al monte o meter algo de deporte pues mejor, pero también salidas turísticas por todo lo que tenemos por aquí para ver.

Carlos: Además, aunque tanto Ruth como yo somos de Pamplona, tenemos el pueblo de mi padre, Rocaforte, al lado de Sabuesa, y nos gusta mucho llevarles allí para que estén en la naturaleza.

¿Y cuál es vuestro plan favorito para vosotros?

Paula: A mí me gustaría viajar más, lo que pasa es que tengo un problema, que es que no me gusta mucho caminar, entonces me canso rápido (sonríe).

Carlos: No, el problema es que tú tienes 13 años y tu hermano más pequeño tiene 7, entonces hay diferencia. Ella quiere ir a una ciudad y ver tiendas y su hermano quiere estar en las barracas, el otro ir a jugar al fútbol y éste otra cosa, así que tratamos de conjugar los gustos de todos.

Ruth: Es complicado…

Álex: Nos gustan mucho las tirolinas y cerca del pueblo solemos ir a un parque de aventuras para disfrutar.

Carlos: Sí. Artamendia es un parque de aventuras que está cerquita del pueblo y a tres kilómetros de la localidad de Aibar.

Álex: Una vez en el pueblo nos fuimos por el monte con el todoterreno y casi nos perdemos… (risas).

¿Quién conduce mejor, aita o ama?

Todos: ¡Mójate, mójate! (risas)

Álex: ¡Pues conducen muy bien los dos! (sonríe)

¡Cómo sabes!

Todos: (Risas).

Paula: A ver… Depende de la situación. Si es un sitio al que llegas muy justo pues elijo a papá porque va más rápido y si es para ir más tranquilo pues elijo a mamá (sonríe).

Todo lo que sea disfrutar al aire libre os gusta, ¿no?

Ruth: Sí. A los críos les gusta mucho ir a Rocaforte y para nosotros es tranquilidad y eso que Zizur Menor es un sitio tranquilo y sigue manteniendo la esencia de pueblo, no es como en Zizur Mayor que hay más urbanización y hay más jaleo.

Álex: Ahora justo acabamos de estar en Rocaforte, en el torneo de futbolín que se celebra todos los años, y lo hemos pasado genial.

Siendo los dos de Pamplona, ¿cómo habéis acabado viviendo en Zizur Menor con vuestros hijos?

Carlos: Pues cosas de la vida…

Ruth: Sí y la verdad es que fue todo un acierto porque cuando nos casamos vivíamos en Iturrama pero nos vinimos aquí porque a Carlos esta zona le gustaba mucho para correr y bueno, pues fue lo mejor que pudimos hacer porque con cuatro críos la verdad es que se vive muy tranquilo.

Carlos: No apreciamos que aquí en Pamplona sales y ya estás en el monte. En cambio estás en Madrid o en Barcelona estás lejísimo y aquí es una pasada.

Cambiando de tema, ¿os gusta leer?

Paula: A mí me encanta.

Ruth: Paula devora los libros. Es capaz de leerse un libro en un día.

Álex: Yo tengo una colección de libros de fútbol que se llama ‘Los futbolísimos’ y me los estoy leyendo porque son muy interesantes.

Ruth: A los dos pequeños en cambio les gusta menos la lectura y les tenemos que obligar (risas).

Carlos: Nosotros, Ruth y yo, no tenemos mucho tiempo para leer…

Ruth: A Carlos le gustan sobre todo los libros de historia.

Carlos: Sí, pero he de reconocer que cuando me pongo a leer me entra el sueño…

Todos: (Risas).

Paula, recomiéndanos un libro entonces…

Paula: El libro que más me ha gustado hace poco es uno que me regalaron los reyes que se llama ‘La cabaña’, que es de asesinatos y misterios.

Ruth: Es que le gustan esas cosas…

Carlos: (Aparece por el salón su perra) Rodi, ¿también quieres salir?

Ruth: Rodi tiene 16 años ya, así que está de regalo como quien dice… (sonríe).

Parece una perrita muy buena, ¿no? ¡Cómo se deja coger y todo!

Álex: Sí, aunque a veces, cuando no quiere, muerde (sonríe).

Ruth: Cuando le molestáis mucho, se enfada… ¡Como es normal!

Álex: Pero a mí me gusta mucho estar con ella y acariciarla. Es que me encantan los animales.

Ruth: Sí, le gusta mucho estar con animales y también con niños pequeños.

Carlos: Es muy niñero…

Ruth: Sí, yo creo que en eso ha salido a mí porque yo soy educadora infantil.

“Me gustaría que la salud me respete para poder seguir corriendo carreras y acercando el deporte a nuestros hijos”

Carlos Gallués - Gerente

¿Y si os dijera que os regalamos un viaje a cualquier sitio del mundo a hacer lo que os diera la gana? Con la condición de que os pusiérais de acuerdo, claro…

Ruth: Cuando no teníamos hijos, de novios, Carlos y yo viajábamos mucho.

Carlos: Sí. Los países nórdicos nos gustaron mucho.

Ruth: Nos hemos movido mucho por Europa y si podíamos nos escapábamos una o dos veces al año. Pero claro, ahora no podemos viajar tanto… (sonríe).

Carlos: Venga, ¿a dónde elegiríamos ir ahora todos juntos?

Álex: Algún sitio bonito, no sé…

Ruth: ¡Yo digo París!

Álex: Ah, ¿porque es una ciudad muy romántica?

Todos: (Risas).

Carlos: ¡Tú eliges PortAventura seguro!

Álex: ¡Sí!

Carlos: Es que hemos estado unas cuantas veces ya. Tres que yo recuerde…

Ruth: Y seguro que volveremos, lo que pasa es que hay algunas atracciones a las que no pueden subir por su estatura, pero cuando volvamos será cuando puedan todos montarse en todo.

Álex: Ya casi casi me puedo montar en el dragón Khan.

Paula: A mí me gustan las que más miedo dan.

Ruth: Es que no tiene miedo ninguno.

¿Cuál es tu atracción favorita?

Álex: El dragón Khan porque te suben a muchos kilómetros de altura y es como si te fueras a caer.

Paula: Lo que más me gustó fue una atracción que se llama Shambhala. No me imaginaba la rapidez y la impresión que te da. ¡Sueltas mucha adrenalina!

¿Un sueño que os gustaría cumplir?

Ruth: Este año volverme a clasificar e ir a un Mundial me encantaría, pero bueno, he hecho ya muchas más cosas que me gustaría, así que he cumplido muchas más cosas de las que imaginaba. Hombre, tengo 45 años y bueno, poder seguir disfrutando de este deporte sería un sueño. Pero ganar el campeonato de España e ir al clasificatorio y si todo va bien al Mundial en el mes de noviembre, en Perugia, Italia, sería mi sueño. A ver si la cosa va bien… Ya estamos trabajando en ello, así que a ver qué tal…

¡A por el oro entonces!

Ruth: Ojalá, eso sería demasiado, pero oye, tampoco creía que iba a entrar en el pódium del Mundial y así ha sido. Lo lucharé.

¿Y en tu caso?

Carlos: En mi caso que me respeten las lesiones y me permitan seguir practicando deporte. Pero a mí no me interesa ganar nada, ¿eh? (risas) Porque al final los deportes de larga distancia te pasan mucha factura. Yo tengo una fascitis crónica desde hace ya unos años y a base de fisio, infiltraciones y demás puedo seguir corriendo, pero tiene fecha de caducidad. Entonces mi sueño sería poder seguir haciéndolo.

Ruth: Es que ninguno de los dos somos críos. Entonces, el simple hecho, como dice mi marido, de poder seguir disfrutando unos añitos más de esto nos conformamos.

Tampoco pedís tanto, ¿no? (risas)

Ruth: ¡No, no pedimos tanto!

Carlos: Bueno, ella sí (risas). Ella sí que es ambiciosa. Lo que pasa es que quedar segunda pica, ay… (risas).

¿Y vosotros, chicos, si os concediesen un deseo, qué pediríais?

Álex: Yo quiero una vida feliz.

Carlos: Álex no es nada materialista. ¿Y tú, Erik, qué dirías?

Erik: No sé.

Carlos: ¿Nadar entre tiburones?

Erik: ¡Noooo!

Carlos: ¡Pues tú verás!

Álex: A él le gustan mucho las ardillas por ejemplo.

Paula: Yo como soy muy temeraria a mí me gustaría hacer puenting (sonríe).

Ruth: A ella todo lo que sea el riesgo le encanta.

Paula: O paracaidismo.

Erik: Eso me gustaría hacer a mí también.

Erik: ¿Y a ti qué te gustaría, Marco?

Marco: No sé… ¡Motocross!

Carlos y Ruth: ¿Motocross?

Erik: Y también le gustan mucho los coches. ¡Podrías ser piloto de carreras!

Pues sí que están saliendo aficiones…

Ruth: ¡Sí, estamos descubriéndolas ahora mismo! (risas).

Bueno, pues estamos casi terminando. ¿Si pudiérais vivir otra vida, en quién os gustaría reencarnaros?

Ruth: ¡Qué difícil!

Carlos: En ésta hay que pensar… Hay personajes históricos muy interesantes, como Sancho El Fuerte. Pero yo si te digo la verdad, sin que parezca presuntuoso, me gustaría volver a vivir mi vida. Estoy contento con la vida que tengo porque de los personajes ves sólo lo que te enseñan de ellos, pero no sabes las penas que llevan detrás.

Como pasa con las redes sociales…

Ruth: Bueno, Carlos no cuelga nada.

Carlos: No. Y soy más feliz, ¿eh?

Ruth: La verdad es que las redes quitan mucho tiempo. Yo la verdad todo lo que tengo en redes sociales es profesional porque me gusta guardar mi intimidad. Yo si volviera a nacer me gustaría empezar con esto del culturismo mucho antes. Haber tenido la oportunidad de haber empezado más jovencita a ver qué podría haber pasado. Pero bueno, la vida es como es…

Pero nunca es tarde…

Ruth: Eso es. A mí es lo que me ha enseñado la vida, que nunca es tarde. He empezado a estudiar un módulo, he empezado con el deporte… Si te lo propones todo puedes conseguirlo y es eso lo que queremos transmitir a nuestros hijos.

¿No os gustaría conocer a ninguna persona famosa entonces?

Erik: A mí a nadie (risas)

Marco: ¡Sí! Yo quiero conocer al gato con botas.

Carlos: ¿Y a ti, Álex, a un futbolista tal vez? (le pregunta a Álex)

Álex: ¡Sí! A mí a Messi.

Ruth Cuesta y Carlos Gallués, rodeados de sus cuatros hijos y algunos de sus trofeos deportivos. Javier Bergasa

Pero Messi no juega en el Osasuna, ¿eh?

Álex: Ya, pero es que es muy bueno…

Todos: (Risas).

Carlos: ¿Y a ti, Paula? ¿A la Rosalía? (risas)

Paula: No, no me gusta. ¡Eso te lo has inventado! Si tuviera que elegir elegiría a Sebastián Yatra.

Carlos: ¡Ese no sé ni quién es! (sonríe) Es que tenemos gustos musicales muy distintos…

¿Ah, sí? ¿Cómo sería vuestra playlist para ir juntos de viaje en el coche, por ejemplo?

Carlos: Yo era de ‘thrash metal’. Diría que ‘Reise, Reise’, de Rammstein.

Ruth: Yo escucho un poco de todo. No sé…

Carlos: Ésta es más de techno, de discoteca (risas).

Ruth: Sí (sonríe). Yo diría Insomnia,.

Paula: Yo cualquiera de los discos de María Becerra.

Erik: Hay muchos cantantes que me gustan pero diría el del tío.

Carlos: ¡Eso, el grupo en el que toca mi hermano! Es Txuma, uno de los mariachis de Puro Relajo.

Marco: Y yo... pondría Los Cantajuegos.

Ruth: Sí, los Cantajuegos siguen siendo nuestra banda sonora a día de hoy (risas).

Ruth Cuesta

Educadora infantil


Es natural de Pamplona y tiene 45 años. En 2022 resultó subcampeona del mundo en Bikini Wellness en el campeonanato que se celebró en Praga. Trabaja como educadora infantil y está estudiando un Grado Superior de Deporte. Vive en Cizur Menor con su marido, Carlos Gallués, y sus cuatro hijos: Paula (13 años), Álex (11), Erik (9) y Marco (7).

Carlos Gallués

Gerente


Nacido en Pamplona, tiene 43 años y trabaja como gerente de la empresa familiar. Está casado con Ruth Cuesta, con quien ha formado una familia numerosa en Cizur Menor. Le gusta mucho correr y aunque empezó haciendo carreras de monte, luego dio el salto al triatlón en la categoría de Ironman.