Receta de verano: pizza de garbanzos, una opción sin gluten
En el universo de la cocina saludable, hay platos que sorprenden por su ingenio y sabor, y esta pizza de harina de garbanzo es uno de ellos. Aprende a elaborarla con este paso a paso sencillo para sorprender a tus comensales
Ligera, sin gluten, rica en proteínas vegetales y con una textura que conquista desde el primer bocado, esta pizza con base de garbanzos es una receta que sorprenderá a más de uno. Y para combinarla, nada mejor que una ensalada fresca, vibrante y aromática.
Ingredientes
Para la base de pizza:
- 1 taza de harina de garbanzo (aprox. 100 g)
- 3/4 taza de agua (180 ml)
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de orégano seco o romero (opcional)
- Pimienta negra al gusto
Para la ensalada:
- 1 taza de garbanzos cocidos (aprox. 150 g)
- 1/2 cebolla morada, cortada en rodajas finas
- 1 taza de rúcula fresca (unos 30 g)
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharadita de vinagre balsámico
- Sal y pimienta al gusto
- Crema de vinagre balsámico para decorar (tipo caramelo balsámico)
Elaboración
Precalentar el horno a 200 °C (390 °F).
Mientras, en un bol, mezclar la harina de garbanzo con la sal, el orégano (si lo usas) y un poco de pimienta. Añadir el agua y el aceite de oliva poco a poco, mezclando con un batidor de mano o tenedor hasta obtener una masa líquida, similar a la de los crepes pero un poco más espesa.
Verter la mezcla sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal (o en una sartén de hierro que puedas hornear) y extiéndela formando una base fina y uniforme. Hornear durante 15–20 minutos, hasta que esté firme al tacto y los bordes ligeramente dorados. Si quieres una textura más crujiente, puedes darle la vuelta a mitad de cocción y hornear 5 minutos más por el otro lado.
Para preparar la ensalada, en un bol, mezclar los garbanzos cocidos con la cebolla morada, el aceite de oliva, el vinagre balsámico, sal y pimienta al gusto.
Justo antes de servir, añadir la rúcula y mezcla suavemente.
Para montar la pizza, una vez la base esté lista y ligeramente templada, colocar la ensalada fresca encima.
Decorar con un hilo de crema de vinagre balsámico por encima.
Como sugerencia: se puede añadir queso feta desmenuzado, aceitunas negras o tomates cherry si quiere un extra de sabor. Y para una textura más crujiente, tostar los garbanzos con especias en el horno durante 10 minutos a 180 °C antes de mezclarlos con la ensalada.
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