Un cinco estrellas de la capital, de la talla del Gran Hotel Lakua, acogió este martes por la tarde la entrega de los XXII Premios Aenkomer al Comercio y Servicios, que reconocieron a media docena de establecimientos de Álava, con la presencia del diputado general de Álava, Ramiro González, la alcaldesa de la capital alavesa, Maider Etxebarria, y el consejero de Comercio, Javier Hurtado. Algunas de estas tiendas eran inconfundibles.
Tal era el caso de la vitoriana Guereñu Dendak, especializada en la venta de gigantes y cabezudos de Vitoria, pulseras de Álava o cartas Fournier, entre otros souvenirs, lo que le otorgó el galardón por su Comercio Orientado al Turismo. Otros, como el mercado de la Florida, también fueron reconocidos en el transcurso de la gala, en este caso por su impulso al euskera.
En el caso de María Eugenia Arraindegia, se hizo con el reconocimiento de Comercio Tradicional Rural, y en el laudioarra Nina Life Stiling, por su innovación en su negocio de ropa.
Jesús Carnicero se mereció el galardón por su trayectoria empresarial, mientras que Plaza Amurrio se llevó el premio en la categoría de relevo empresarial.
Premios a la dinamización urbana y comercial
También tuvo reconocimiento el Mercado de Abastos de la capital alavesa, que ya de por sí está de celebración este año por su 50 aniversario. El broche de oro a la gala lo puso la entrega de la séptima edición de los Premios Aenkomer a la Dinamización urbana y comercial con tres nombres como grandes protagonistas: Ricardo Sáez de Heredia (que fue durante un cuarto de siglo abad de la Cofradía de la Virgen Blanca), La noche de las velas y Fernando Soto.
La gala, que estuvo conducida por Zorione Erezuma, se abrió con unas palabras de Andoni Aspuru y Edurne Parro, presidente y directora de Aenkomer (Arabako Merkataritza eta Zerbitzuetako Enpresariak-Empresarios y Empresarias de Comercio y Servicios de Álava). Una importante representación de distintos sectores de la sociedad alavesa quiso acompañar el acto de la entidad llevado a cabo en el Gran Hotel Lakua.
