El PP ha registrado en el Congreso una proposición no de ley en la que solicita la paralización y la retirada del proyecto de creación de un centro de refugiados en Vitoria.

Esta iniciativa se une a la que los populares han presentado ya en las Juntas Generales de Álava, que se debatirá la próxima semana, y a la que también van a defender en el Ayuntamiento de Vitoria.

En su proposición, el PP insta al Gobierno de España a retirar el proyecto de construcción y puesta en funcionamiento del Centro de Acogida de Protección Internacional de Vitoria en la antigua residencia de Arana, en la capital alavesa.

Hace más de un año se licitó el proyecto que tiene un coste de 14,6 millones de euros y que el Gobierno estima podría estar en funcionamiento a principios de 2025, con una estimación de 350 plazas.

En el texto se denuncia que este proyecto responde a una "decisión unilateral del Gobierno que no ha contado con el consenso suficiente, ni con criterios de coordinación institucional y social".

El PP recuerda que desde distintos ámbitos institucionales y sociales se ha considerado como "negativa" la construcción de este macrocentro.

En la presentación de esta iniciativa ha estado presente el portavoz adjunto del PP en el Congreso, Rafael Hernando, quien ha considerado que este tipo de centros no responden a un "modelo racional de integración" de migrantes, sino a una "improvisación" del Gobierno para gestionar la "llegada masiva" a Canarias.

Hernando ha advertido de que si el Gobierno se convierte en el "último eslabón de la cadena del tráfico de personas" porque no da una respuesta adecuada a la situación se seguirán "fomentando" las mafias de la inmigración irregular.

Tras defender un modelo "vinculado al empleo", Hernando ha preguntado al PNV si en esta cuestión también va a seguir siendo la "muletilla" del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Se ha preguntado si el PNV "se ha contagiado de las corrupciones" que, ha dicho, afectan al Gobierno de Sánchez y no sabe qué decir, como en las comisiones de investigación del Congreso y el Senado, creadas recientemente sobre la compra de mascarillas y a las que últimamente no asiste nadie del PNV, ha criticado.

Sobre la iniciativa en contra del centro de refugiados, el diputado popular por Álava, Carmelo Barrio, ha criticado la "unilateralidad" de la decisión que "no cuenta con el suficiente consenso ciudadano, ni por su necesidad, ni por su ubicación ni porque responda al modelo de acogida" hasta ahora desarrollado en Euskadi.

Barrio ha añadido que este tipo de centros están "descartados" en el ámbito europeo por su tamaño y se ha preguntado por las razones por las que hay que hacer "saltar por los aires" el modelo que hay en Euskadi si funciona adecuadamente.

Ha recordado que el proceso de creación de este centro ya está en marcha, incluso con algunas obras ya iniciadas, pero ha asegurado que se puede paralizar y dar al edificio otros usos sociales, culturales o sanitarios.

A este respecto, el presidente del PP de Álava, Iñaki Oyarzabal, ha insistido en dar otra finalidad a la antigua residencia Arana, porque hay "prioridades que atender" en este territorio, como las relacionadas con los cuidados de personas.

Oyarzabal ha defendido centros de refugiados "más pequeños" con una atención "más personalizada" y ha concluido que el actual proyecto va en contra del modelo de acogida y de integración que hasta ahora se ha llevado a cabo en Vitoria, en Álava y en toda Euskadi.