Tres hombres han sido detenidos este fin de semana en Vitoria acusados de agredir a sus parejas o exparejas, uno de los cuales también pegó al parecer a sus hijos de 8 y 11 años en el domicilio familiar.

Los tres arrestos se produjeron el domingo, el primero de ellos pasadas las 13:00 horas en el barrio de San Cristóbal. Una mujer llamó a la Policía Local para denunciar que su esposo había pegado con una chancleta a sus hijos menores porque el ruido que hacían le había despertado.

La denunciante aseguró también que era maltratada continuamente por su marido, con amenazas de muerte, y que no era la primera vez que agredía a sus hijos.

Los agentes comprobaron la marca de la chancleta en la nalga del pequeño y el mismo arrestado reconoció que le había pegado. La mujer informó de otro episodio de agresión de esta semana hacia los menores en el que les tiró al suelo. Posteriormente, apareció por la vivienda el arrestado que reconoció la agresión al niño y fue detenido.

La noche del domingo el detenido fue otro varón de 37 años en el barrio de Zaramaga, hasta donde se desplazaron los policías locales tras la llamada de una mujer que aseguró que su novio le había amenazado, agredido y quitado el móvil porque estaba celoso de su expareja, con la que habían coincidido previamente en un cumpleaños.

Al parecer, le arrebató el teléfono móvil y le propinó un manotazo en la cara y le pinchó con una llave en la mano, tras intentar recuperar el aparato. Los agentes le detuvieron por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia de género.

El mismo día, la Guardia Urbana arrestó a un tercer hombre de 41 años en la Plaza Zumaia. Los agentes encontraron a una mujer de rodillas con un fuerte golpe sobre la ceja derecha y un abultamiento de esa zona.

Testigos informaron a la patrulla de que tras oír gritos acudieron al lugar donde la víctima les pidió ayuda para levantar una moto y les informó de que había sido agredida con un casco de moto por su expareja.

El hombre reconoció a los agentes haber golpeado a su expareja al comprobar que, tras una discusión en un bar con ella, le había tirado su moto al suelo.

La cuarta detención practicada el fin de semana se produjo el sábado cuando los agentes arrestaron a un hombre de 35 años por quebrantar una orden de alejamiento de su expareja.