Finalizada la bajada de Celedón, la comitiva municipal llega a la iglesia de San Miguel para la celebración de las vísperas en honor a la Virgen Blanca. En apenas dos minutos, la comparsa de gigantes, cabezudos, caballos y sotas baila bajó las escaleras del templo.

Hay ganas de fiesta y las calles y plazas del centro y del Casco Viejo están abarrotadas, muchos jóvenes se bañan en fuentes como las de la calle Abendaño y la plaza Lovaina y Kutxi se sumerge en La Blanca.

Vuelven también los gigantes, cabezudos, caballos y sotas. La comparsa recorre ya las calles del centro de Vitoria en su primer paseo itinerante para deleite de niños y niñas.

 Jóvenes y no tan jóvenes piden agua a los vecinos apostados en los balcones y, como es tradición, muchos de ellos no tardan en volcar sus baldes sobre las caldeadas cabezas.

Turno de blusas y neskas

Mientras la mayoría se divierte, 70 operarios y 33 voluntarios de Egibide comienzan a adecentar la plaza para que esté de nuevo transitable.

Desde ahora, cientos de actos festivos vertebran el programa festivo de La Blanca hasta el 9 de agosto. Hoy, blusas y neskas toman las calles.