Ya están aquí. El momento se ha hecho esperar y mucho, tres años por la pandemia, pero esta tarde las 27 cuadrillas de blusas y neskas han derrochado diversión, buen humor y ganas, "sobre todo muchas ganas", de fiesta para recuperar el paseíllo con motivo de la celebración, este 25 de julio, del Día del Blusa y la Neska en la capital alavesa.
Más multitudinarios que nunca, y es que el parón por la pandemia ha acrecentado las ganas de diversión y de reivindicar nuestra cultura y tradiciones, cerca de 6.000 blusas y neskas han desfilado por las céntricas calles de Vitoria desde la plaza Nueva hasta la plaza del Renacimiento, junto al Iradier Arena. Y lo han hecho sin perder ni un ápice de su ironía, alegría y picaresca, además de demostrar que el parón obligado por el covid-19 no ha afectado a su forma física.
Doble paseíllo
Blusas y neskas han vuelto a realizar esta tarde un doble paseíllo de ida y vuelta al antiguo recinto taurino. Un paseíllo que, antaño, se realizaba camino al evento taurino, pero que con los nuevos tiempos, ya sin toros en la ciudad, se ha transformado en una kalejira de música, color, cánticos y ganas de pasarlo bien.
La seis cuadrillas que conforman la Federación han sido las encargadas de iniciar el recorrido. Concretamente la cuadrilla Batasuna ha tenido el honor de dar el pistoletazo de salida al reencuentro con este esperado evento festivo. Tres veteranos de la formación han encabezado la comitiva, acompañados por un burro. "Ya no hay carrera de burros, pero el está presente", comentaban, señalando al asno.
Tras ellos, los míticos empujones, saltos y canciones a los que se ha sumado el personal que ya esperaba en los laterales de la calle Dato. Un público que ha ido a más, según avanzaban las cuadrillas, conformado por familias, personas mayores y chavales con ganas de pasarlo bien.
Una vez han pasado el sexteto de cuadrillas de la Federación, ha llegado el turno a las 21 que agrupan a la Comisión. En este caso, la cuadrilla Siberiarrak ha sido la encargada de empezar a animar a la ciudadanía, bajo el lema "koadrilla bat, familia bat" que transmitía las ganas de los blusas y neskas por volverse a juntar dentro de sus "familias festivas". Dentro de este grupo, se han estrenado "nerviosos" la cuadrilla Akelarre, fundada en 2020, pero que ha tenido que esperar más de dos años para estrenarse en sus primeras fiestas.
Más juventud y neskas
Las 27 cuadrillas de blusas y neskas que hay en Vitoria tienen este año "mucha más gente que nunca". Federación y Comisión estiman que son "cerca de 6.000 personas" este año, debido al notable incremento que han experimentado dentro del sector juvenil y concretamente, en el sector femenino. "La gran mayoría de las novatas son neskas", apuntan desde la Comisión. Un relevo generacional que garantiza el futuro de las cuadrillas.
