El PNV no da credibilidad a los mensajes que lanzó el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, en su reciente visita a Euskadi, donde prometió respetar al pueblo vasco. Los jeltzales atribuyen su mensaje a un camuflaje temporal para poder hacer campaña en Euskadi con un discurso más digerible, pero creen que el verdadero Feijóo es el que hace campaña "en Albacete", y con él es imposible pactar.

El presidente del EBB, Andoni Ortuzar, ha sido categórico en respuesta a este medio de comunicación en un desayuno de Fórum Europa: "Por sus obras los conoceréis. Uno que viene a un mitin y se marcha a otro sitio tiene muy fácil hablar. Feijóo ha estado intentando vaciar el caladero de votos de Vox y ha hecho proclamas imposibles de asumir para nosotros. ¿Qué Feijóo es el que vale, el de Albacete que dice A, o el de Gasteiz que dice Z? Me temo que el de Albacete, porque ahí tiene más caladero de votos", ha despachado.

Sobre la hipótesis que está poniendo en circulación Feijóo, la posibilidad de gobernar sin Vox pero con grupos como PNV y Coalición Canaria, el PNV cree que no es verosímil desde el punto de vista aritmético, pero tampoco desde el punto de vista político. "El PP y su foro mediático están pegando a todos los palos. Unas veces indisimuladamente para naturalizar a Vox y otras, en función de las encuestas, igual les quema arrimarse a Vox y tienen que pegar un pendulazo e ir a partidos que vamos con un label de respetabilidad y democracia. Un pacto con el PNV se ve como un pacto respetable, con gente de orden. Con el Feijóo que habla en Albacete, eso es imposible", ha zanjado Ortuzar. Mientras tanto, el portavoz en el Congreso y candidato por Bizkaia, Aitor Esteban, insistía por lo bajo en que es imposible y en que Feijóo se empeña en decir A y decir B al mismo tiempo.

Feijóo aseguró en Gasteiz que es consciente de que tiene que garantizar el bilingüismo y la cultura propia, pero esta promesa la realiza mientras pacta con la ultraderecha de Vox, que apuesta en su programa electoral por fulminar a la Ertzaintza y anular la autonomía fiscal vasca. Incluso en solitario, el programa del PP recoge planteamientos recentralizadores y defiende el bilingüismo desde el principio del “equilibrio” de ambas lenguas en las escuelas, lo que parece remitir al discurso del PP que ve al castellano en una situación de desprotección frente al euskera.

A todas estas dificultades se le suma que el PP quiere derogar leyes en las que participó o que apoyó el PNV, como la de Memoria Democrática o la referida a las personas Trans. Los jeltzales se van a oponer a tumbar esas leyes.

Modelo territorial

Esteban ha sido también muy crítico con la forma en la que los dos principales partidos estatales ignoran el problema de encaje de Euskadi y Catalunya en sus programas para las elecciones generales de este domingo, y ha exigido "reformas estructurales" para dejar atrás la tensión porque, de lo contrario, "no vamos a poder conseguir la estabilidad". "El PP apunta a medidas de recentralización y de nuevo al Código Penal, que no resuelve los problemas. En el PSOE, el presidente se jacta de intervenir en competencias que no son suyas, y en su programa plantea una Ley de Cohesión Territorial que es una Loapa", ha alertado. 

Frente a ello, ha planteado para Euskadi "un reconocimiento nacional, bilateralidad y un árbitro neutral", y ha recordado la potencialidad que tiene la foralidad. Aspira, además, a que un nuevo estatus para Euskadi cuente con respaldos más allá del nacionalismo vasco.

Esteban ha realizado estas declaraciones en un desayuno informativo del Fórum Europa celebrado este jueves en Bilbao, en el que han intervenido también los cabezas de lista por Gipuzkoa, Maribel Vaquero, y Araba, Mikel Legarda, además del presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar. Legarda ha planteado la prevalencia de los convenios laborales autonómicos frente a los estatales, así como el reparto de los fondos europeos a través de proyectos estratégicos regionales. Vaquero ha puesto en valor las partidas presupuestarias arrancadas por el PNV gracias a la fortaleza que le ha dado contar con un grupo propio, y ha avisado de que su partido saldrá en defensa de la cultura y el euskera.

La primera caída de Sánchez

Esteban ha querido posicionar también al PNV como un partido que "cree en las instituciones y en la estabilidad porque, si no la hay, es muy difícil conseguir acuerdos de calado". 

Frente al intento de EH Bildu de presentarse como la garante de un gobierno progresista y de presentar al PNV próximo al PP, Esteban ha recordado que el anterior Gobierno de Sánchez cayó porque ERC y Bildu decidieron tumbar los Presupuestos. Esteban ha puntualizado que el PNV no es "muleta de nadie", pero que "siempre va a actuar responsablemente" porque no le gusta "lanzar los dados constantemente con elecciones".

Política española de "Twitter y pandereta"

Ortuzar, por su parte, ha reivindicado la forma de hacer del PNV, alejada de la crispación, frente a una política española de "Twitter y pandereta". El jeltzale ha criticado esta campaña electoral "bronca, de mucha polarización", y se ha reafirmado en que Euskadi "tiene que marcar la diferencia" frente a esa confrontación y esa "utilización de la mentira".

"En esta legislatura hemos sabido marcar la diferencia dedicándonos a las cosas del comer y el autogobierno. Nuestra aportación ha dado una pizca de sensatez y concepto jurídico en unos debates que se perdían en diatribas excesivamente ideologizadas. En la política española se ha instalado el Twitter y la pandereta, y no creo que sea bueno para la política. A esos tuits se les da pandereta, ruido, y se alimenta el choque entre bloques y dentro de cada bloque, lo que es llegar al paroxismo de la confrontación", ha denunciado.

Frente a esa forma de hacer política, ha reivindicado al PNV, que ha "sabido hacer las cosas de otra manera". "Hemos sido firmes pero nunca hemos insultado, nunca nos hemos desposicionado como partido institucional, de gobierno, que quiere acuerdos. En esta nueva legislatura, el PNV quiere seguir marcando la diferencia", ha defendido.

Por otro lado, Esteban no se ha mostrado partidario de elevar la edad de jubilación, un comentario que solo ha escuchado de manera informal al círculo de empresarios.