Este 5 de noviembre unos 250 millones de estadounidenses están convocados a las urnas. Sin embargo, el resultado solo depende de unos miles de votos repartidos entre unos estados claves, conocidos como "swing states". Este sistema electoral fue instaurado por los padres fundadores con el objetivo de asegurar una representación territorial justa. Sin embargo, ha terminado provocando cierto desequilibrio, ya que pone el destino del país en mano de siete estados. En este sentido, el voto popular no determina quien ocupa la Casa Blanca, sino los votos del Colegio Electoral, que cuenta con 538 votos y requiere al menos 270 para ganar.

Los 7 "swing states"

Los estados que juegan un papel crucial en los comicios son: Pensilvania, Georgia, Carolina del Norte, Míchigan, Arizona, Wisconsin y Nevada.

Pensilvania

Con 19 votos electorales, Pensilvania combina áreas rurales conservadoras con ciudades como Filadelfia y Pittsburgh, más demócratas. Este estado ha sido determinante en elecciones cerradas y su fluctuación puede ser crucial.

Georgia

Georgia ha cobrado importancia en las elecciones recientes, impulsada por el crecimiento de su población afroamericana. Aunque Kamala Harris lidera los esfuerzos demócratas para atraer este voto. Sin embargo, su apoyo puede no ser tan sólido como en ocasiones anteriores.

Arizona

Tradicionalmente republicana, Arizona se ha convertido en un campo de batalla entre Trump y Harris. La inmigración es el tema central, dada su proximidad a la frontera con México, y aunque los cruces han disminuido, sigue siendo una preocupación para los votantes.

Míchigan

Míchigan es otro estado crucial, donde la economía y la recuperación post-pandemia son temas centrales. La participación de votantes jóvenes y de la comunidad árabe-americana podría influir significativamente en el resultado en favor de Kamala Harris.

Carolina del Norte

Históricamente republicana, ha experimentado cambios demográficos significativos, con un aumento en la población de color y votantes con educación universitaria, que tienden a favorecer a los demócratas.

Wisconsin

Wisconsin es un estado tradicionalmente demócrata que se enfrenta a preocupaciones sobre la economía y el derecho al aborto, que son prioridades para sus votantes.

Nevada

También generalmente demócrata. Destaca por su alta proporción de población hispana, lo que la convierte en un estado clave para el partido de Harris.