El Consejo de Ministros ha aprobado por segunda vez la senda de estabilidad para el periodo 2026-2028, con los mismos objetivos que fueron rechazados en el Congreso la pasada semana. La portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, ha señalado que estos objetivos se remitirán ahora a las Cortes, donde por el momento no cuentan con apoyos suficientes para salir adelante.
Si el Congreso también rechaza esta segunda senda, entrarán en vigor los objetivos de déficit del plan fiscal estructural, que aunque mantienen las cifras globales, obligarán a las comunidades autónomas a cerrar en equilibrio presupuestario en lugar de permitirles una décima de déficit, lo que supone perder 5.485 millones de margen de gasto entre 2026 y 2028.
Tras esa segunda votación, sea cual sea el resultado, el Gobierno habrá completado los trámites previos a los presupuestos de 2026 y podrá presentar las cuentas.
Prevé una reducción al 2,1% del PIB en 2026
La senda prevé que el déficit público se reduzca al 2,1 % del PIB en 2026, al 1,8 % en 2027 y al 1,6 % en 2028. Los objetivos de déficit del Estado serán del 1,8 % en 2026, 1,5 % en 2027 y 1,4 % en 2028; los de la Seguridad Social, del 0,2 % del PIB en 2026 y 2027, y del 0,1 % en 2028. Las comunidades autónomas podrán tener un 0,1 % del PIB de déficit en cada ejercicio, mientras que las corporaciones locales deberán cerrar en equilibrio. La deuda pública bajará al 100,9 % del PIB en 2026, al 100 % en 2027 y al 99,1 % en 2028, para cumplir con la regla de gasto, fijada en el 3,5 % para 2026, el 3,4 % para 2027 y el 3,2 % para 2028.