Suelos, frontones, piscinas, plazas, zonas residenciales, terminado de urbanizaciones, aparcamientos e, incluso, acabados interiores. El asfalto fundido se ha convertido en el denominador común de muchos de estos proyectos. Una solución versátil que trasciende la imagen gris de las aceras comunes en nuestro entorno. Porque en la actualidad este material constructivo permite múltiples opciones —colores variados, acabados diferentes— pero también ofrece muchas propiedades (impermeabilidad, elasticidad, colocación sencilla, fácil mantenimiento, durabilidad…).
De diseño, adaptabilidad y propuestas ingeniosas tiene mucho que decir la compañía alavesa Balgorza, cuyo trabajo y apuesta por la última tecnología les ha distinguido entre la competencia. Su especialidad es el asfalto fundido, un material constituido por una mezcla de betún, arena, grava y filler y aplicado a temperaturas entre 180 y 240ºC sin necesidad de compactación.
En función de la formulación utilizada en su fabricación y del tratamiento superficial empleado se puede conferir al producto unas propiedades y una estética diferente
La novedad aquí es que en función de la formulación utilizada en su fabricación y del tratamiento superficial empleado (sílice, impresión, pintura, pulido, bitu-terrazzo, colores diversos...) se puede conferir al producto unas propiedades y una estética diferente para cubrir diferentes necesidades.
Pero como no hay nada mejor que una imagen que hable por sí sola, en la web de Balgorza se puede curiosear la gran variedad de proyectos de asfalto fundido que han visto la luz: el Boulevard de Vitoria-Gasteiz (Araba), el frontón del Estadio (Vitoria), el Puerto de Mutriku (Gipuzkoa), o las piscinas de Burlada (Navarra). También destaca la obra del Restaurante El Chispial (Vitoria), que es un claro ejemplo de cómo este material puede utilizarse en el interior de un local consiguiendo un efecto estético —además de funcional— muy moderno y estiloso.
Impermeabilidad asegurada y duradera
Además de en asfalto fundido, en Balgorza son especialistas en técnicas de estanqueidad e impermeabilización, así como en investigación de nuevas técnicas y productos fiables e innovadores. En esa búsqueda hacia la hermeticidad han ideado un procedimiento sin parangón en el sector llamado Imperbal. ¿En qué consiste?
Se trata de un sistema constructivo con tres capas de impermeabilización que evita la entrada del agua. A diferencia de la competencia, en la que únicamente utilizan telas asfálticas autoprotegidas o protegidas con gravas o agua, Imperbal incluye una primera capa en la que se aplica una imprimación bituminosa; la segunda capa está compuesta por una tela asfáltica; y, finalmente, la tercera capa es de asfalto fundido, que de por sí ya es una solución que garantiza la impermeabilización. Por lo tanto, este extra de protección tiene grandes garantías: mayor impermeabilización, mayor insonorización y funcionalidad en el acabado, además de prolongar su durabilidad.
¿Y no es eso lo que buscamos todos y todas? Que aquellas obras que hagamos resistan el paso de los años como el primer día, sin tener que pensar en arreglos ni nuevas reformas. Que una clínica no tenga que parar su actividad porque tenga humedades; que un frontón no esté cerrado al público porque está en malas condiciones… Es en estas situaciones cuando nos percatamos de la importancia de invertir en productos de calidad.
Imperbal incluye una triple capa de impermeabilización
Respetuosos con el medio ambiente
Diseño, versatilidad, impermeabilidad. Y también sostenibilidad. En los últimos años el equipo de Balgorza ha trabajado con mucha ilusión y esfuerzo hasta situarse como la mayor productora de asfalto fundido del Estado, capaz de ejecutar grandes proyectos y suministrar este producto en toda la península Ibérica. El asfalto fundido con su técnica milenaria, se convierte en un material actual, duradero, rentable y reciclable, que encaja perfectamente en la obligada economía sostenible del siglo XXI.
El asfalto fundido con su técnica milenaria, se convierte en un material actual, duradero, rentable y reciclable, que encaja perfectamente en la obligada economía sostenible del siglo XXI
Y es que Balgorza siempre ha entendido que el desarrollo económico debe ir de la mano de la sostenibilidad y en su compromiso de mejora continua ha participado en diferentes iniciativas que promulgan el respeto por el medio ambiente; el Programa ‘Pacto Verde’ desarrollado por el Ayuntamiento de Vitoria‐Gasteiz; el ‘Programa de Ecoeficiencia en la empresa vasca 2014’, desarrollado por Ihobe; el Programa ‘Stop CO2 Euskadi’ con el objetivo de reducir la emisión de GEIs derivado de las actividades que realiza…
También se ha inscrito en el Registro de huella de carbono, compensación y proyectos de absorción de CO2 para calcular su huella de carbono y que le permita seguir avanzando en su objetivo de la neutralidad. Además, cabe destacar que la empresa se ha asociado dentro del clúster medioambiental ACLIMA reafirmando así su compromiso con el planeta.