La economía vasca mejoró ligeramente en enero en relación a diciembre de 2020 y la industria muestra "un relativo optimismo de cara al futuro, ligado a la campaña de vacunación", aunque esa evolución positiva no se refleja en el mercado laboral.
Así se refleja en el Termómetro Económico del Gobierno vasco, que otorga al mes de enero una puntuación de 42,1 (en una escala de 0 a 150) un valor mejor que el de diciembre 40,7 y el más elevado desde que se inició la pandemia.
Este indicador estaba por encima de 100 (zona de crecimiento sólido) antes de la llegada del covid, momento en el que se desplomó llegando al mínimo en abril, con 27,5 puntos, cuando aún seguía vigente el confinamiento.
Posteriormente fue subiendo mes a mes (29,4 en mayo, 31,5 en junio, 33,9 en julio, 35,5 en agosto y 41,6 en septiembre), pero en octubre (40,9) sufrió un nuevo descenso por las consecuencias de la segunda oleada de la covid y volvió a empeorar en noviembre (40,1).
El rumbo cambió en diciembre al llegarse a 40,7 puntos y en enero la tendencia al alza continúa a pesar de que la economía vasca sigue por debajo de 50 puntos, con lo que se mantiene en zona de decrecimiento.
En el primer mes de 2021 la industria ha suavizado sus caídas y además "muestra un relativo optimismo de cara al futuro, ligado a la campaña de vacunación". También mejoran los servicios en su conjunto ligeramente, aunque siguen con "descensos significativos", en especial en las actividades relacionadas con el turismo.
La mejor evolución de la economía tiene aún unos efectos "muy limitados" en el mercado laboral, según el citado termómetro
