- El cambio de circunstancias socioeconómicas entre diciembre y junio ha variado ligeramente el pronóstico sobre la evolución del empleo. La estabilidad se incrementa y las opiniones pesimistas de las empresas, con reducciones inferiores al 25%, es la mayor corrección a la baja. En este sentido, José Ángel Corres señala que “el reto pasa por reducir el paro, mantener los puestos de trabajo e incluso crear empresas en nuevos o estratégicos sectores como las energías sostenibles, la movilidad, la ciberseguridad, los entornos digital y tecnológico, y el ámbito socio-sanitario”.

Por otro lado, un 67,1% de las empresas exportadoras vascas indica que la crisis del covid-19 está afectando negativamente a sus ventas exteriores. Un 37,6% (40,1% en junio) dice que la pandemia han originado una reducción de sus ventas exteriores superior al 20%. Por el contrario, un 21,1% (34,8% en junio) no las ha reducido, e incluso un 11,6% (7,8% en junio) ha visto como sus exportaciones aumentaban. Resulta significativo, y con relevancia para una recuperación económica sostenible, que un 65,3% de las empresas indique que el objetivo principal de su actividad en el momento actual lo constituya el “análisis de escenarios de mercado para la salida de la crisis”.

“La internacionalización, según el presidente de las Cámaras de Comercio Vascas, para muchas empresas ha posibilitado una mayor resistencia a los efectos de la epidemia, aunque la globalización y los posicionamientos políticos, como los aranceles o el brexit, hayan afectado y afectarán a la demanda”.

Las prioridades empresariales de Euskadi en diciembre se centran principalmente en las finanzas con un nivel de prioridad de 3,8 sobre cinco, el mercado nacional (3,6), la comunicación (3,4) y la digitalización (3,4). Otra de las claves para salir de la crisis es la inversión. Un 20,5% de las compañías afirma que no va a realizar inversiones, un 51,5% que lo mínimo imprescindible y un 46,8% que serán inversiones de mantenimiento y reposición por amortización.