- Las tensas negociaciones que están manteniendo sindicatos y dirección de la empresa Tubacex en torno al nuevo ERTE que se pretende poner en marcha una vez finalice el actual -del 4 de noviembre al 4 de febrero de 2021 y que afectaría a 674 empleados (prácticamente la totalidad de las plantillas, en las fábricas de Amurrio y Llodio)- lejos de aliviarse, cada vez son más intensas.

De hecho, para el comité de empresa “se plantea un ERTE más agresivo que el actual, pudiendo regular un 80% en el periodo de tres meses, frente al 60% del expediente activo desde mayo, sin muchos datos que justifiquen tal medida”. Y es que, en la reunión del martes (hoy jueves habrá otra), los sindicatos solicitaron documentación que puso sobre la mesa que la empresa está obteniendo con el ERTE actual un ahorro mensual en gastos de personal “de 700.000 euros”, cuando el porcentaje medio de regulación “está en TTI sobre el 51%, a falta del dato de Aceralava”. Asimismo, los delegados sindicales insistieron en la necesidad de un plan estratégico de todo el grupo y de un plan industrial en las plantas ubicadas en el Alto Nervión, y de que se les informe de las cuentas y medidas que se han tomado en otras plantas del grupo. “Nos parece mala fe la que están mostrando en la mesa. No se entiende que no se esté cubriendo la regulación máxima que permite el actual ERTE (60%) y que presenten uno nuevo que llegue hasta el 80%”, explica Eduardo Ibernia, delegado de ELA, para quien sí es un dato objetivo y constatable el hecho de que “reconocen que acaba de entrar un pedido de OCTG que cargaría dicho departamento hasta finales de año”.

La mesa de negociación de este nuevo ERTE tiene previsto reunirse otra vez hoy.