- El sector de la construcción naval en Euskadi está capeando mejor que bien los efectos de la crisis económica mundial generada por la pandemia del coronavirus y en este complicado 2020 los tres astilleros privados vascos -Zamakona, Balenciaga y Murueta- han logrado cinco nuevos contratos de buques con lo que tienen carga de trabajo para todo el ejercicio y casi seguro para todo el próximo 2021, según fuentes del sector naval vasco.

Gracias a su flexibilidad, a su capacidad de construir buques a medidas del cliente y a la especialización en determinados nichos de mercado -pesqueros, dragas, remolcadores especializados y barcos de apoyo a las plataformas marinas, fundamentalmente-, los astilleros vascos, tras un buen año 2019, están consiguiendo sortear un ejercicio especialmente complicado por los efectos negativos del covid-19 en la economía.

No hay que olvidar que, según fuentes del Foro Marítimo Vasco, el mercado naval mundial este año está siendo un desastre porque los nuevos contratos para construir buques han caído un 42% en el primer semestre hasta situarse en el nivel más bajo desde 1996 como consecuencia de la complicada situación generada por el virus. Además de esta situación mundial, en el caso de la construcción naval en Europa, la situación es aún peor porque el continente se había especializado en la producción de buques de alto valor añadido como ferrys y cruceros, y este segmento, con el parón brutal del turismo, está sin demanda.

Ello ha vuelto a poner de relieve el enorme peso de Asia en la construcción naval mundial pues en el primer semestre de este 2020 de los 269 buques, con 5,75 millones de toneladas CGT, contratados en todo el mundo, China ha logrado cerrar 145 buques (3,51 millones de toneladas CGT), seguida de Corea del Sur con 37 buques (1,18 millones CGT) y de Japón con 36 buques (570.000 CGT). Por ello hay que poner en valor el trabajo comercial de los astilleros vascos que han conseguido cinco contratos, cuatro ya firmados y otro a falta de flecos.

La compañía guipuzcoana Balenciaga, que el próximo 2021 va a celebrar su centenario con una segunda grada operativa en Zumaia, ha logrado tres contratos. El vizcaíno Zamakona ha firmado el mes pasado un nuevo contrato para sus instalaciones de Santurtzi y Astilleros Murueta está a falta de flecos para concretar otro. En total, la cartera de pedidos sumaba 13 buques al cierre del primer semestre, según fuentes del Ministerio de Industria, la mayoría para armadores de Noruega, Groenlandia, Dinamarca y Reino Unido, repartidos entre Murueta, 4; Balenciaga, 6 y Zamakona, 3.

Esta última empresa oficializó hace un mes que construirá un nuevo buque de transporte de pescado vivo para la compañía noruega Intership. Se trata de un buque de 72 metros de eslora y 17 metros de manga, con una capacidad de carga de 2.200 metros cúbicos. La entrega de este buque está prevista para el primer trimestre de 2022. Por su parte, Balenciaga ha botado recientemente un barco oceanográfico encargado por el Nature Institute de Groenlandia, aunque portará pabellón danés. Este contrato es especialmente significativo para Astilleros Balenciaga, dado que se trataba del primer buque destinado a la investigación marina que construía. Por lo general, en las licitaciones para encargar este tipo de embarcaciones suele ser preciso que el astillero tenga experiencia en su construcción pero el buen hacer de Balenciaga le ha permitido obtener las certificaciones necesarias con lo que se le ha abierto la puerta a un nuevo mercado. En este contexto, con 14 buques en cartera, los astilleros vascos tienen garantizado carga de trabajo para todo este año y, probablemente, también para 2021 y esto, en un ejercicio complicado, es una buena noticia.

No hay que olvidar que en el pasado 2019, sin crisis por la pandemia de coronavirus, los astilleros vascos lograron cinco nuevos contratos, lo que supuso el 20% del total de contratos obtenido por el conjunto de astilleros del Estado, que sumaron 25 nuevas unidades. Los astilleros vascos cerraron el pasado año con una cartera de pedidos de 10 unidades, lo que representaba el 22% de todo el Estado.

Este ejercicio, en el citado primer semestre del año, los astilleros del Estado han firmado 14 nuevos contratos, con un total de 72.018 toneladas CGT lo que representa dos barcos menos y un 19% menos en tonelaje que en igual periodo de 2019.

Las empresas vascas fabricantes de equipos, más internacionalizadas, sí se han visto incididas ya que el parón ha afectado de una manera global a toda la industrial mundial pero firmas como Ingeteam han logrado pedidos como el del armador belga Jan de Nul para un nuevo buque destinado al montaje de aerogeneradores marinos en China.

Un buen 2019. Las empresas del sector marítimo vasco en el año 2019 facturaron un total de 2.855 millones de euros (un 2,5% más respecto al año anterior). En lo que al empleo hace referencia, las empresas del sector marítimo vasco emplearon a un total de 13.705 trabajadores (un 1,1% más en relación al ejercicio precedente). Es de destacar el índice de exportación de los nuevos contratos obtenidos durante el año 2019, que ha sido del 100%. Siendo todos ellos para armadores extranjeros.