- La evolución de las ventas de automóviles en Euskal Herria, en el Estado y en Europa es clave para el sector industrial vasco porque la de automoción es la primera industria de Euskadi y la mayor generadora de riqueza en aportación al PIB, algo que parecen olvidar algunos consistorios. Por ello, que los concesionarios avancen para este 2020 una caída de las ventas de coches del 21% en la CAV y del 27% en Nafarroa no es una buena noticia aunque la caída será inferior a la media prevista para el Estado español, según Faconauto, la organización empresarial del sector.
Los concesionarios vascos consideran que con el esfuerzo comercial que están realizando y las buenas ofertas que hay actualmente de la mano del plan Renove se puede conseguir mejorar la caída de ventas estos meses.
La patronal de los concesionarios Faconauto calcula que las matriculaciones de vehículos nuevos caerán un 21,3% en Euskadi a cierre de año y se quedarán en 31.274 unidades, casi 8.500 menos que en 2019, cuando las ventas se redujeron por primera vez desde 2012.
De cara al próximo 2021 las previsiones de Faconauto son más optimistas ya que estima que las matriculaciones volverán a crecer y cifra el repunte en tasas del 14,8%, aunque esta subida no permitirá recuperar todas las ventas perdidas debido al parón por la pandemia.
En el caso de Nafarroa, las matriculaciones de vehículos nuevos caerán un 27% durante el presente ejercicio y sumarán 8.358 unidades, según datos de la consultora MSI presentados por Faconauto, en una jornada online. De cara al próximo año, al igual que en la CAV, las previsiones de los concesionarios son de una cierta recuperación de las ventas de coches que en el caso de la Comunidad Foral navarra podrían repuntar un 19%, cuatro puntos más que en la CAV.
Y es que el sector del automóvil se encuentra en un contexto complicado por una doble vía. Primero, por la crisis económica ligada a la pandemia y, segundo, por la fase de transición en que se encuentra camino del coche eléctrico, lo que genera incertidumbres en los compradores que prefieren aplazar las decisiones de compra hasta ver que futuro se espera para un producto con ciclo de vida de casi 15 años.
Los concesionarios vascos de automóviles configuran un sector económico de primer nivel, con un total de 106 empresas en la CAV, que facturan unos 1.762 millones de euros anuales y que emplean a cerca de 6.500 personas, y de 44 empresas en Nafarroa que mueven unos 539 millones de euros con 1.600 trabajadores en plantilla.
Este colectivo se está enfrentando a uno de los ejercicios más adversos de los últimos años y de hecho el primer trimestre finalizó con una rentabilidad negativa del -0,56%, según Ganvam y se prepara, según reconocen en el sector, para un cambio muy importante del modelo de negocio en los próximos años.
Ayer, en una jornada telemática organizada por la compañía vasca experta en digitalización LIN3S sobre La estrategia digital en el sector de la automoción, uno de los ponentes, Manuel Sánchez, del primer portal de compra venta de vehículos por internet Coches.net, recordó que, según los últimos informes sobre el sector como el de KPMG, “en el año 2025 habrá la mitad de puntos de venta de automóviles”. “Y el que no tenga una estrategia digital clara será expulsado del mercado”. Algo que reconoció la representante del concesionario vasco Gaursa, Lourdes Moreno, que resaltó la importancia de “tener a nuestros clientes cerca”. Para Valter Barbio, director de LIN3S RBS, la “salida de la crisis pasa por poner a nuestro cliente en el centro de todo, no nuestro producto, ni nuestros servicios, el cliente tiene que ser el foco”.
Mientras el sector acomete la transformación digital necesaria, a corto plazo los concesionarios fían la recuperación del negocio, y de la industria fabricante de coches, al éxito del Plan Renove que en el caso del País Vasco está siendo positivo.
Faconauto hizo ayer un primer balance del Plan Renove a nivel estatal y recordó que desde que se puso en marcha el 15 de junio suma 110.000 operaciones, con lo que se espera superar las 210.000 para final de año.
Pese a ello, los concesionarios consideran que las ventas de automóviles en el mercado español este 2020 sufrirán una caída del 32% por los efectos de la pandemia.