- El Gobierno y los agentes sociales suscribieron ayer un pacto con las líneas generales para reactivar la creación de empleo de calidad tras la parálisis económica generada por el coronavirus, pero que deberán desarrollar con medidas concretas en unas negociaciones que comenzarán inmediatamente.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y los líderes de las patronales CEOE y Cepyme y de los sindicatos CCOO y UGT firmaron el pacto en un acto en el que evidenciaron la unidad y la capacidad de acuerdo con el objetivo de generar confianza en la economía, aunque con la nota discordante que pusieron los empresarios respecto a la posibilidad de una subida de impuestos.
"Cuando España acuerda con España, España avanza y gana confianza en el futuro", resaltó Sánchez, quien desgranó los puntos generales del acuerdo que sólo concreta un programa financiero de apoyo público a la solvencia y la inversión empresarial de 50.000 millones de euros, que ya aprobó ayer el Consejo de Ministros. "Que las principales fuerzas empresariales y sindicales sean capaces de alcanzar acuerdos sólidos con regularidad durante los últimos años y meses son un excelente indicador de la solidez democrática y un mensaje de confianza", destacó Sánchez, un mensaje que fue repetido también por los agentes sociales.
Este ambiente de unidad y respaldo a las medidas de reactivación económica del Gobierno fue interrumpido, sin embargo, por las peticiones de los empresarios al Gobierno para que no lleve a cabo su anunciada reforma fiscal. "No compartimos su planteamiento fiscal porque pensamos que este no es el momento", dijo el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, a quien se sumó su homólogo de Cepyme, Gerardo Cuerva, asegurando que perjudicaría tanto a grandes como a medianas y pequeñas empresas, así como a autónomos.
Sánchez respondió que, para impulsar la cohesión social, es necesario llevar a cabo una reforma fiscal "que vincule la justicia fiscal con la necesaria justicia social", al tiempo que también reiteró su intención de "modernizar la legislación laboral" y lograr la sostenibilidad y suficiencia del sistema de pensiones.
El acuerdo impulsa la reincorporación a las empresas de los trabajadores en ERTE primando los ajustes de capacidad en horas de trabajo y no en empleos, al tiempo que incentiva a las empresas para que vuelvan a contratar a los temporales cuyo contrato se extinguió durante la pandemia, si es posible, y de manera indefinida. Asimismo, insta a desarrollar un marco adecuado de contribución compartida para los ERTE por causas económicas, técnicas, organizativas y de producción (ETOP) de forma que se consolide como instrumento para proteger a las empresas y al empleo. Estos son algunos de los puntos que establece el acuerdo para avanzar en las mesas de diálogo social que se retomen entre Gobierno, patronal y sindicatos.
Las partes se comprometen a modernizar el marco laboral para minimizar el impacto sobre el empleo de futuras crisis futuras y las políticas activas con el fin de reorientar los recursos hacia un sistema de apoyo personalizado, formación y recualificación de los trabajadores, desplegando mecanismos para alinear la oferta y la demanda en el mercado laboral. Muestran su apoyo al desarrollo de la economía social y el sistema de cuidados, así como al colectivo de los autónomos, "tanto en la superación de las consecuencias económicas de la pandemia como en la reactivación de sus actividades profesionales".
Se comprometen además a asegurar el reforzamiento de los servicios públicos especialmente el sanitario y el sistema de dependencia, así como el servicio público de empleo (SEPE), mejorando la calidad de los empleos y los mecanismos de coordinación y de colaboración público-privada existentes.
En materia de pensiones, apuestan por abordar las adaptaciones que sean necesarias para reforzar y garantizar la sostenibilidad y suficiencia a largo plazo del sistema público de pensiones, protegiendo su poder adquisitivo. Y en materia fiscal, se comprometen a impulsar medidas para aflorar la economía sumergida, "luchando contra el fraude, la precariedad y la evasión fiscal".
En este sentido, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, confió en que en estos foros se resuelvan tanto los problemas "históricos" como los detectados durante la pandemia, abriendo así "una puerta a reconstruir un nuevo país" partiendo de los servicios públicos. "Tenemos que abordar de forma concertada el reto de la digitalización", la transición ecológica o la formación permanente de los trabajadores, subrayó el líder de CCOO, Unai Sordo, así como corregir las deficiencias del modelo laboral para que los despidos "sean la última opción" de las empresas.
"Es un compromiso que traslada la idea de solidez de país y solvencia para afrontar enormes retos"
Secretario general de CCOO
"Lo que hay que hacer es combatir la economía sumergida, que en España supone un 24% del PIB"
Presidente de la CEOE
"El Gobierno tiene que ser consciente del gran esfuerzo de consenso de los agentes sociales"
Secretario general de UGT
"La subida de impuestos a las grandes empresas también repercute en las pequeñas"
Presidente de Cepyme
"Estos pactos son muy valiosos porque hacen que el esfuerzo de todos merezca la pena"
Presidente del Gobierno