- La comarca de Aiaraldea volvió a teñirse de luto ayer a la mañana cuando comenzó a circular la pésima noticia de que otra persona había fallecido en su puesto de trabajo. En este caso, un vecino de Llodio, de 57 años, y en la empresa Talleres Berasategui del polígono Txako del cercano municipio vizcaíno de Arrigorriaga que, según informaron desde el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco, cayó desde una altura de cuatro metros, en torno a las 07.00 horas. Los compañeros dieron aviso rápidamente a los servicios de emergencia que, sin embargo, no pudieron salvar su vida.
El trágico suceso en esta empresa -que lleva 45 años funcionando y se dedica a la calderería pesada- fue objeto de una declaración institucional de la Junta de Portavoces del Ayuntamiento de Llodio, que en un texto conjunto de todos los partidos que integran la Corporación, no solo transmitieron sus condolencias a la familia, amistades y compañeros de trabajo "de nuestro vecino Aurelio", sino que también se adhirieron a las iniciativas cuyo objetivo sea denunciar este accidente mortal y mostrar su solidaridad y apoyo a la familia del fallecido.
De hecho, la plantilla de Talleres Berasategi realizará hoy un paro de 24 horas y, a las 12.00 horas, se movilizarán ante la sede de la empresa. Además, el comité de huelga de Aiaraldea realizó ayer en la comarca dos convocatorias, a partir de las siete de la tarde, que consistieron en cinco minutos de silencio y una cacerolada.
Asimismo, desde el Consistorio laudioarra volvieron, por un lado, a denunciar todas las muertes en accidentes laborales y, por otro, a reclamar el derecho a volver con vida del trabajo. No en vano, con el de ayer son cinco los trabajadores vinculados a Ayala que han fallecido como consecuencia de accidentes laborales en los últimos meses. En julio un joven operario falleció en la planta de Tubacex en Llodio. En septiembre, un trabajador de 59 años falleció en la planta de Aceralava, perteneciente al mismo grupo. De igual modo, otro laudioarra falleció en la empresa GHI Hornos Industriales de Galdakao cuando una pieza le cayó a la cabeza. El pasado febrero, murió otro trabajador en la empresa Zororza Gestión de Residuos SL de Murga en Ayala y ayer jueves, el vecino de Ugarte.
En este sentido, desde el sindicato LAB también remitieron una nota en la que condenaron una muerte con la que "ya son al menos 24 las y los trabajadores muertos en el trabajo en Euskal Herria desde inicio de año"; al tiempo que señalaron que "en esta empresa de Arrigorriaga se reanudó la actividad el pasado martes, y no ha presentado aún el preceptivo protocolo de prevención ante el coronavirus". Asimismo, mostraron su solidaridad y apoyo a la familia y las personas allegadas del trabajador fallecido. "Tenemos claro que para acabar con la violencia laboral han de garantizarse unas condiciones de trabajo y vida dignas. Tenemos derecho a volver a casa con vida. Necesariamente, debemos construir un nuevo modelo donde, por encima del beneficio económico, la prioridad sea la salud de los y las trabajadoras", sentenciaron.
Por su parte, ELA exigió una investigación que esclarezca lo sucedido "y que, a su vez, sirva para depurar las posibles responsabilidades". "Es inaceptable que tantas personas trabajadoras estén falleciendo en su puesto de trabajo cuando a día de hoy existe una normativa clara en materia de prevención y medios adecuados para evitar los accidentes. Las cifras hablan por sí solas, y deberían ser suficientes para que tanto las instituciones como la autoridad laboral den un cambio radical a su política de prevención y salud laboral".
Según detalló UGT Euskadi en un comunicado, se trata del décimo trabajador fallecido en accidente laboral en lo que va de año en Euskadi, además de los dos desaparecidos en el vertedero de Zaldibar. "Exigimos a los empresarios una verdadera integración de la prevención de riesgos en los puestos de trabajo", subrayaron.
El de ayer es el primer accidente laboral desde que entrara en vigor el estado de alarma y el séptimo en lo que va de año, sin tener en cuenta el derrumbe de Zaldibar en el dos operarios continúan desaparecidos y sus cuerpos aún no han podido ser recuperados. El siniestro se produce precisamente tres días después de que se retomaran las actividades no esenciales tras el parón de la actividad que decretó el Gobierno.