bilbao - El fallecimiento de dos trabajadores en apenas 24 horas en Bizkaia, uno el lunes en Galdakao y otro el martes en Santurtzi, ha causado una fuerte conmoción en el mundo laboral y sindical. Según informaron ayer varias centrales, el trabajador fallecido en las instalaciones de Astilleros Zamakona pertenecía en realidad a una subcontrata, algo similar a lo ocurrido el lunes en GHI Hornos. Los sindicatos denuncian "un modelo perverso" en el que en muchas ocasiones "fallan las medidas preventivas".
Con los dos accidentes mortales de esta semana Euskadi confirma un inicio de 2020 en el apartado de la siniestralidad laboral realmente negativo. A los cinco accidentes laborales mortales que han trascendido públicamente hay que sumar otro más sucedido in itinere a finales de diciembre pero cuya víctima falleció el 4 de enero y otros dos de carácter no traumático. Así, según CCOO, la CAV sumaría ya ocho trabajadores fallecidos en poco más de un mes -sumando las cifras de Nafarroa el total en Euskal Herria asciende a 14 víctimas mortales-. El hecho de que se encadenen en poco tiempo tal cantidad de siniestros fatales alimenta la sensación de que algo falla en el ámbito de la prevención.
En el caso del accidente mortal más reciente, CCOO informó ayer de que el fallecido, de 61 años, pertenecía a una empresa subcontratada de Astilleros Zamakona. El trabajador perdió la vida al desplomarse una grúa de gran tamaño y tonelaje. "Es inadmisible que se actúe solo cuando hay muertos sobre la mesa. Que se sancionen con dureza los comportamientos inhumanos que anteponen criterios de producción frente a criterios de salud", denunció CCOO. Desde ELA y LAB también se reclamaron medidas de seguridad y se hizo hincapié en la temporalidad y la brevedad de los contratos como causa de los accidentes. Aunque no era el caso del fallecido en Santurtzi, está comprobado que los trabajadores con menor experiencia tienen más riesgo de sufrir un accidente.